(EP/InfoCatólica) «El fraude es una coartada que fue instalada hace bastante tiempo en los medios de comunicación, en las redes sociales, a través de los opinadores contratados, organizaciones no gubernamentales con financiamiento extranjero, la Iglesia Católica alineada con la derecha», ha afirmado Quintana en una entrevista con la agencia de noticias rusa Sputnik.
En respuesta, la Conferencia Episcopal Boliviana (CEB) ha rechazado estas acusaciones. «La Secretaría General de la Conferencia Episcopal Boliviana desmiente categóricamente las falsas afirmaciones del ministro de la Presidencia del Estado Plurinacional de Bolivia, Juan Ramón Quintana, de que la Iglesia Católica sería responsable de promover las acusaciones de fraude en las elecciones generales de Bolivia», apunta la CEB en un comunicado difundido este sábado.
«Las afirmaciones del ministro son totalmente falsas y carecen de todo fundamento real. Son acusaciones lanzadas contra la Iglesia u otras instituciones de Bolivia, en forma gratuita con el único fin de menoscabar su credibilidad», ha añadido la CEB.
En ese sentido, sostiene que la Iglesia Católica en Bolivia «no ha realizado ni inspirado acción o reflexión alguna que tuviese como fin promover o financiar acusaciones de un fraude electoral en el país», en cambio reivindica su «rol pacificador y de servicio a la concordia y la democracia en el país».
Por todo ello, exigen al ministro que presente pruebas de sus afirmaciones o retractarse de las mismas, «ya que con ellas está ofendiendo los sentimientos del pueblo católico de Bolivia».
«Es importante que haya más capacidad de autocrítica y humildad en nuestras autoridades para cumplir con el rol de instrumentos de unidad y de paz que Bolivia necesita en este momento», han añadido. Finalmente, han llamado a la población a la calma y a la serenidad, «ya que la violencia no resuelve nada».
Lo cierto es que la CEB publicó el día después de las elecciones un comunicado en el que se señalaba que había indicios de fraude en las elecciones.