(Abc/InfoCatólica) Carlos Centeno, del departamento de Medicina Paliativa de la Clínica Universitaria de Navarra, aseguró que la única respuesta posible para el enfermo que sufre deben ser los cuidados paliativos.
«Esta medicina avanzada, una buena medicina, es la solución al problema. Y lo es, no solo para los pacientes terminales que están en la última etapa sino también para los enfermos crónicos que necesitan mejorar su calidad de vida»
España se ha quedado en el «pelotón de cola» en Europa de esta medicina que alivia el sufrimiento, asegura este especialista. Ni tiene suficientes medios, ni tampoco una legislación que lo regule a nivel estatal. En su opinión, «no tiene sentido plantear una ley de eutanasia sin que se garantice el acceso universal a los cuidados paliativos».
Por su parte, Álvaro Gándara, coordinador de la Unidad de Cuidados Paliativos de la Fundación Jiménez Díaz de Madrid, pidió que «nuestros responsables políticos» se fijen «en lo que está ocurriendo en países donde la eutanasia lleva años siendo una práctica legal antes de proponer una legislación similar en España».
Efectivamente, en Holanda y Bélgica los casos de eutanasia se han triplicado y los requisitos para practicarla se han relajado. «No hay límites cuando se despenaliza. La pendiente deslizante está ahí; se abre una puerta difícil de controlar», advirtió Gándara.
Otro riesgo de la legalización de la eutanasia es la pérdida de confianza en los profesionales sanitarios, señaló. «En Holanda hay ancianos que optan por irse a vivir a una residencia en Francia o Alemania porque no confían en que su médico les cuide en lugar de poner fin a sus vidas».
Javier Rocafort Gil, director Médico de la Fundación Vianorte-Laguna, tomó la palabra recordando algo evidente: «Vamos a morir todos». Por tanto, la eutanasia no es algo que se le ofrecerá a un tercero, sino a cualquiera.
A Rocafort le preocupa cómo la legislacion planteada por el PSOE deja de lado a un 5 por ciento de la población española. A esas personas con una discapacidad grave, crónica e incurable a la que se dirige la ley de eutanasia como posible diana. «Están aceptando que hay un porcentaje de la población cuya vida no merece ser protegida como la de los demás», dijo. Quizá, por ello, la sociedad se escandaliza por la muerte de una joven de 17 años pero entiende el suicidio asistido de una enferma con esclerosis múltiple como el de María José Carrasco, cuyo marido le ayudó a morir.
El PSOE lleva la eutanasia en su programa electoral
Precisamente, la actual ministra de Sanidad en funciiones, la socialista (PSOE) María Luisa Carcedo, se ha comprometido a impulsar de nuevo una ley de eutanasia en la próxima legislatura, tras las elecciones del próximo 10 de noviembre. «Lamentablemente, la Ley estatal cayó en el Senado en la última legislatura. Pero vamos a impulsar la Ley de muerte digna»
«Seguiremos trabajando en esta dirección», ha añadido durante la inauguración del III Congreso de Organizaciones de Pacientes.