(Agencias/InfoCatólica) El portavoz de la organización NI Voiceles, convocante de la manifestación, aseguró que los ciudadanos estaban indignados y frustrados ante el hecho de que no se les consultara sobre un cambio legislativo que va en contra de lo que gran parte de la población norirlandesa.
Los manifestantes marcharon en silencio hasta la sede del Parlamento de Irlanda del Norte, y una vez allí encendieron la luz de sus móviles (celulares) durante seis minutos en representación de los seis condados norirlandeses.
Las últimas encuestas reflejan que la oposición al aborto llega hasta el 60% de la población. La ley prohibía hasta ahora todo aborto salvo peligro de la vida de la madre y lo aprobado por el parlamento de Westminster lo convertiría en legal hasta la semana 28 de gestación.
El pasado 10 de julio el parlamento británico aprobó las enmiendas abortistas que entrarán en vigor a menos que el Parlamento de Irlanda del Norte, actualmente en suspenso por la falta de acuerdo para formar gobierno, sea restaurado antes de finales de octubre, lo cual es poco probable.