Cerro de los Ángeles, el «epicentro»

Monseñor, se agradece la claridad conceptual y el equilibrio y profundidad de sus artículos.
Agradezco también su entrega y dedicación a esta tarea divulgativo-evangelizadora en Internet.
Pienso que es importante que los prelados con altas responsabilidades en la Iglesia se dejen ver, participen y nos iluminen con su magisterio.
Me gustó mucho su artículo "Toda rodilla se doble...", que ya está guardado en favoritos.

Y, por supuesto, el próximo domingo hay que participar en uno de los acontecimientos gozosos del mes y del año, en el Cerro de los Ángeles, en el epicentro de la onda expansiva.

Que Dios se lo pague.

Monseñor, se agradece la claridad conceptual y el equilibrio y profundidad de sus artículos.
Agradezco también su entrega y dedicación a esta tarea divulgativo-evangelizadora en Internet.
Pienso que es importante que los prelados con altas responsabilidades en la Iglesia se dejen ver, participen y nos iluminen con su magisterio.
Me gustó mucho su artículo "Toda rodilla se doble...", que ya está guardado en favoritos.

Y, por supuesto, el próximo domingo hay que participar en uno de los acontecimientos gozosos del mes y del año, en el Cerro de los Ángeles, en el epicentro de la onda expansiva.

Que Dios se lo pague.

"Reinaré en España".

Amén.

Pero, ¿y quién tiene capacidad para consagrar España al Sagrado Corazón de Jésús?

Aquí, una visión diferente:

http://www.carlismo.es/modules.php?name=News&file=article&sid=224

"Reinaré en España".

Amén.

"Reinaré en España".

Amén.

...y en verdad reinó y con más veneración que en otras partes.

Lo primero que se puede decir de celebrar éste acto, es que ha sido una idea magnífica. Pero una cosa es una cosa y otra cosa es otra cosa.
Creo que el "terremoto" que desea y espera Monseñor Munilla, y yo también, sólo se producirá cuando se den las condiciones adecuadas.
Lo primero que tenemos que hacer es "volver al amor primero", per tal y como lo dice, el Primer Mandamiento de la Ley de Dios, y como enseña F. de S. Tomemos cuanto podamos del vino sagrado de la Caridad. En tomar éste vino consiste todo lo que necesitamos para que se produzca el deseado "terremoto", que como "todo lo bueno,viene de lo alto". ¿Pero saben los católicos de nuestra España consagrada tomar éste vino? Pues yo creo que no. Por ésta razón nos vienen tantos males y tan pocos bienes, pues como sabemos Dios es extremadísimamente generoso.
¿En qué consiste es beber vino sagrado? Beber el vino sagrado consiste en unirse al Padre y participar de Él, según el "grado de oración", o dicho de otra manera, según el grado de devoción que se alcanza; pues oración y devoción hay que entenderlo por la misma cosa, pues son lo mismo. Tanto la oración como la devoción, en cualquier grado son actos de amor y, por lo tanto, de comunicación.
¿Cómo se ama a Dios? A Dios se ama operativamente, igual que las personas se aman. Vemos como en la Sagrada Escritura, y de manera clarísima, en el "Cantar de los Cantares" queda patente la verdad de ésta afirmación. Evidentemente, no tiene los mismos "efectos" amar a la vecina que amar a Dios Invisible, éso ha de quedar claro; pero la "mecánica" en sí es la misma. Nuestra religión es así de sencilla; no hay que calentarse la cabeza ni enredarse para nada con lo de ágape y eros y cosas de esas.
¿Para amar al Dios Invisible qué es lo primero que tenemos que hacer? Hay que empezar por saber elevar los ojos al Cielo, como lo hacía Nuestro Maestro y Señor Jesús, y que San Juan de la Cruz, en el capítulo IV de su "Subida al Monte Carmelo" nos enseña, aclarándonos una palabras del profeta Jeremías. Ësta "operación" amorosa, al principio cuesta un poco, "es como sacar agua de un pozo" decía Nuestra Santa; pero después se va haciendo más fácil, y se va "libando" el vino sagrado con más facilidad cada vez. Sabemos como enseña S. Francisco de Sales que la Caridad= Amor de Dios se "ADQUIERE POR HÁBITO".

Ahora bien, es muy difícil, por no decir imposible, adquirir el hábito de la devoción, cuando, casi antes de empezar se rompe y se destroza la buena disposición que pueda tener en un momento dado una persona. Hay que saber, que las guitarras, el guitarreo, etc.. hacen su papel en las tabernas y sitios similares; pero, por la misma razón que son "buenas" para las tabernas, son nefastas en los templos y en los tiempos de oración. El instrumento de cuerda que se pueda pensar que viene recomendado en la Sagrada Escritura, no es otro que el de las cuerdas vocales de la garganta del hombre. ¿Conoce alguien a algún Doctor de la Iglesia que andase por el mundo con su guitarra. ¡Por favor, por favor! Sí sabemos que les gustaba canciones a todas horas y por los caminos; pero con un "modelo" muy distinto muy distinto, a las que nos torturan hoy en día en los actos religiosos: Que harían un buen papel en programas como OP pero no para las cosas de la Iglesia. ¡Por favor, Por favor! ¡No rompan por ignorancia o "complejines" la devoción!
Bueno, éstas cositas hay que tenerlas en cuenta, si queremos que se produzca el deseado terremeto. Pues el terremoto llegará sin falta a su tiempo. Es decir, cuando hayamos hecho lo que tenemos que hacer: BIEN. Y no olvidemos nunca, que Dios tiene paciencia Infinita, pero espera....

Me gustaría recordar algo que nadie parece saber ahora. El nuevo Monumento al Corazón de Jesús lo hizo Franco, amplió mucho la Basílica y ofreció un acto de desagravio por lo sucedido en la guerra. Ésto fué en el año 1965. Luego hace 44 años, no noventa, de la Consagración de España.

El 21 de junio de pasado asistí a la “Consagración de España al Sagrado Corazón de Jesús” en el Cerro de los Ángeles (asistieron relativamente pocas personas, ¿unas 10.000? -20.000 según Albadigital-) y no menos de media docena de responsables/auxiliares de la organización del acto han pretendido que las banderas que portaba mi grupo de familiares y amigos desaparecieran. Eran banderas sin ningún tipo de escudo o con un Sagrado Corazón a modo de él, dicho sea para los suspicaces. En algún otro punto del espacio interno de la verja que rodea al monumento, otras banderas similares, incluso las situadas a tres metros de las cabezas de los fieles asistentes (estaban sujetas en el extremo de telescópicas cañas de pescar) han sido mansamente arriadas, mientras que sombrillas, paraguas, banderas blancas de asociaciones religiosas y pequeñas pancartas alusivas a la familia cristiana impedían la vista a parte del público.
Los argumentos de que no era verdad la excusa de “no dejar ver”, pues no se exigía el “arriar” paraguas, sombrillas y demás objetos elevados, no hacían mella en los encargados de transmitir la consigna, instigados, sin duda, por alguien que les exigía la desaparición del símbolo de esa España que se volvía a consagrar, con muchísima menos Fé, nula asistencia de la Monarquía (Leandro Alfonso Ruiz Moragas hijo ilegítimo de Alfonso XIII, único “representante” de la Casa Real, se quejó ante Mons. Rouco de que no mencionara a su padre, el rey Alfonso XIII) y de Autoridades, y algo menos de la cuarta parte de los obispos con sede episcopal, eméritos y demás (Curiosa la noticia -de lacigüeñadelatorre- de la ausencia del Arzobispo Castrense, que, desde luego, no estaba visitando a ninguno de sus fieles en “misiones de paz”: por la tarde se le vió en Toledo en la toma de posesión del nuevo arzobispo y salió de la catedral toledana con una gafas de sol de diseño bastante llamativas. Por supuesto, los separatistas gallegos, catalanes y vascos brillaron por su ausencia.). Eso sí, a alguno pude leer en sus ojos que le calaba el argumento de que mentir es pecado, y que era mentira lo de la visibilidad, pues no reclamaban que se cerraran las sombrillas. Además, si tanto les preocupaba la visibilidad a los organizadores, podían, e incluso deberían, haber utilizado la explanada elevada que hay al pié del monumento, donde, por cierto, pululaban con poca atención y respeto, miembros diversos de esas “asistencias” (protección civil, cruz roja, voluntarios, etc) y público enchufado que siempre dan la nota en cualquier acto (incluso religioso). Pero es que, además, alguno de aquellos lobotomizados y obedientes encargados del “orden”, al hacerle ver que era un acto eminentemente referido a España donde no podía sobrar su bandera, dijo, sin duda repitiendo la teórica repetidamente escuchada, que “el venía allí para la consagración del Mundo al Sagrado Corazón”, quedándose tan fresco.
Ni que decir tiene que mi grupo siguió con sus banderas españolas y católicas, porque no hay razón ni ley en impedir su más que justificada asistencia en un acto como ese. Es más, en el folleto que entregaban con la fórmula, cánticos, etc, la bandera de España campea en solitario en la contraportada.
¡NO se puede, No se debe obedecer una “orden” inmoral!, aunque la trate de imponer la CEE
Posteriormente he tenido noticias fidedignas de que hubo personas de la Comunión Tradicionalista que habían estado a primera hora en el Cerro y a los que había echado, de muy malos modos, el Vicario del Cerro por llevar la bandera de España con el Sagrado Corazón de Jesús.
Creo que queda meridianamente claro que la CEE, cuando se trata de España, MIENTE clara y reiteradamente. Y, lo que es peor, es francamente antipatriota muchas veces.
Por lo demás, la liturgia se restringió a la “Eucaristía”, con poco adecuados aplausos a la homilía de Mons. Rouco, el cual no mencionó, por supuesto, por qué el monumento situado frente a él había sido dinamitado (solo lo mencionó una locutora hispana, que no latinoamericana, sin duda poco al tanto de lo político-religiosamente correcto aquí). No se hizo Exposición del Santísimo ni se dio la bendición con Él. Como dijo algún asistente: “Toda la liturgia y la Santa Misa supeditada a la TV: cortaron comuniones, el salmo no se cantó, Rouco con gestos continuos de prisa y malestar si algo se alargaba, homilía cortísima ...” (http://blogs.periodistadigital.com/laciguena.php/2009/06/22/p238632#more238632).
Y, por último, en puridad no se consagró España al Sagrado Corazón de Jesús, pues la fórmula leída y rezada por los fieles solo hace referencia a la consagración personal y no se mienta a España para nada. Si a esto se añade el que no había autoridad política alguna que renovase la Consagración de 1919, la duda acerca de la consagración es doble.

A nosotros se nos prohibió la venta de banderas de España con el Sagrado Corazón, que eran objeto de una demanda frenética, bajo los siguientes argumentos:

1) Que no habíamos pedido autorización.
2) Que "había quedado claro" que no habría "símbolos políticos".
3) Que la consagración no era un "mercadeo"
4) Que se quería evitar "mezclar" política ... (con religión, entiendo).
5) Por último, no se permitió el despliegue de banderas para no entorpecer la visibilidad.

Cuando ayer leí el texto que pronunció Rouco comprendí el por qué se quería impedir la presencia de banderas de España en el Cerro: porque el domingo no hubo ninguna renovación de la consagración de España, a tenor de la fórmula leída.

Todo ello, a pesar de que en la contraportada del librito sobre la "renovación de la consagración" repartido a todos los asistentes en el Cerro de los Ángeles figuraba claramente una bandera constitucional.

Huelga decir que ante tales muestras de hostilidad a la bandera por parte de los organizadores y miembros del servicio de orden, me marché de allí, sin entender muy bien qué es lo que pretendían.

El día 21 NO hubo consagración de España al Sagrado Corazón. En contra de los nobles deseos de Mons. Munilla y muchos fieles, la oración de la consagración era únicamente personal, de los presentes, pero no consagraba España al Corazón del Señor.

Realmente decepcionante nuestro episcopado. Cuando parece que van a realizar un acto valiente y necesario, amagan y se queda en nada. Pero nada de nada. Muy triste.

Estuve este domingo a punto de ir, desde La Rioja, a la ceremonia de la Consagración de España al SCJ.
Seguí la ceremonia por TVE2.
No obstaqnte, a tenor de lo que voy leyendo y viendo, tengo que decir que más bien me alegro de no haber ido.
Varias cuestiones al respecto:
1). No escuché, en TV, ninguna advocación específica ni ninguna fórmula de culto que específicamente consagrara España al SCJ. ¿Dónde está, por lo tanto, la pretendida Consagración?.
2). La cuestión de la bandera, no me parece precisamente una cuestión menor. ¿Cómo puede ser que, se consagra a Dios a una colectividad, cuyos símbolos colectivos no son admitidos en la ceremonia?. Demencial y truculento. ¿Qué pretendían los obispos y de quiénes partieron las consignas al respecto?. ¿A quiénes había que satisfacer? ¿Precisamente a los que no asistieron?. Ya está bien de complejos.
3). El hecho de que tan solo la cuarta parte de los prelados de España asistieran, revela, una división brutal en el seno de la misma, y una falta de concienciación y de inteligencia respecto de la gravedad del momento histórico en el que nos encontramos.
Es revelador de hasta qué punto el virus de la desunión que han diseñado las élites políticas, trufadas de masonería, para deshacer España, y con ella su Fe, ha entrado hasta el mismo seno de la Iglesia Católica. Si Pablo VI veía el humo del infierno entrando en la Iglesia, lo que se pueden comenzar a ver son ya las mismas llamas.
Todo muy lamentable.
Nuestro país, al tiempo, acabará siendo objeto de algún contecimiento cataclísmico que le sacuda de su modorra, de su incepcia, de su indolencia.

No es tampoco que las cosas por ahí fuera estén tampoco mucho mejor. Leo en la prensa cómo los obispos alemanes piden igualdad, en Alemania, para el Islam, para la fuerza político-religiosa que ha arrasado el cristianismo por allí por donde ha pasado.
http://www.hazteoir.org/node/21781
La idiocia ha tomado el lugar del conocimiento y el discernimiento y lo pagaremos.

¿me puede decir alguien dónde se pueden conseguir las banderas con el Sagrado Corazón? Tengo muchas ganas de tener una. Gracias!

Non dago "cerro de los angeles"? EHn ez gara gai guzti honetaz enteratu ere egin!!