(Fides) Los datos han sido recopilados por el Foro Cristiano Unido (UCF, por sus siglas en inglés), organización que ha activado una línea telefónica para denunciar y ayudar en casos de violencia.
Entre los 158 incidentes registrados por la línea de ayuda, 130 se refieren a ataques o intimidaciones y amenazas por parte de grupos violentos que han golpeado a los fieles reunidos pacíficamente en la iglesia o en centros de oración. «Esto significa que practicar la propia fe se está convirtiendo en una causa de inseguridad en el 90% del territorio indio», advierte la organización cristiana.
«La violencia sin castigo se ha convertido en norma en un país en el que ningún partido político ha adoptado una postura firme contra la intimidación de las minorías religiosas», denuncia el comunicado de la UCF.
Otra tendencia preocupante, denunciada por la organización, es la negativa de la policía a archivar el «First Information Record» (FIR), es decir, la denuncia contra los autores de la violencia. «Sólo en 24 de los 158 incidentes se ha registrado un FIR contra los perpetradores», lo que evidencia la «inacción policial» en 11 estados gobernados por partidos seculares, y en 12 estados donde hay partidos marcadamente hindúes.
Entre los estados donde se informa acerca de la violencia contra los cristianos, Uttar Pradesh sigue siendo testigo del mayor número de incidentes, con 32 incidentes de violencia denunciados, seguido de 31 incidentes en Tamil Nadu. «El modus operandi seguido en todos estos episodios es siempre el mismo: una multitud acompañada por la policía irrumpe durante la oración gritando consignas, golpeando a los fieles, incluyendo a mujeres y niños. Luego los pastores son arrestados o detenidos por la policía por cargos falsos de conversiones fraudulentas», explica el UCF.
«Estos casos están tan extendidos que nadie tiene tiempo de condenarlos, ni los políticos, ni la sociedad civil ni los líderes religiosos», añade el Foro. La UCF también observa un aumento constante de la violencia contra los cristianos a partir de 2014. «En 2014 hubo unos 150 incidentes, en 2015 y 2016 hubo unos 200. En 2017 y 2018, hubo 250 y 300 casos respectivamente. En 2019 hubo un promedio de 26 accidentes por mes».
«Nadie debe ser perseguido por su fe. Es preocupante ver que estos horrendos actos sectarios continúan incluso después de una serie de indicaciones dadas al gobierno por el Tribunal Supremo. La policía y los gobiernos locales, responsables de la ley y el orden, deben actuar rápidamente contra cualquiera que promueva la violencia masiva», dice Tehmina Arora, directora de la unidad india de Alliance Defending Freedom (ADF), una asociación comprometida con la protección de los derechos de los cristianos.
Según los medios de comunicación locales, estos actos anticristianos a menudo son llevados a cabo por grupos extremistas hindúes y son fomentados por «discursos de odio religioso» promovidos en la web y en las redes sociales. Según el ADF, los sentimientos y actos anticristianos en la India han aumentado desde que el gobierno federal fue dirigido por el Partido Nacionalista Hindú del Primer Ministro Narendra Modi, que acaba de iniciar su segundo mandato en 2019. En la India hay 966 millones de ciudadanos hindúes, es decir, el 80% de la población india, que es de 1.300 millones de personas; mientras que hay 172 millones de musulmanes (alrededor del 14%) y 29 millones de cristianos (2,3%).