(EP/InfoCatolica) Tras subrayar el "innegable dramatismo, lacerante y cruel" de la actualidad, el cardenal arzobispo censuró que el "grado de la aceptación social del aborto por amplios sectores de la opinión pública".
"Aquí es --continuó-- donde entran en juego principalmente nuestras responsabilidades de fieles y ciudadanos católicos que saben y conocen la gravedad del mandamiento de Dios que es quebrantado y que conlleva una profunda negación de la caridad cristiana y, consiguientemente, el desprecio de Aquél que dio su vida para que tengamos vida y vida abundante, Jesucristo".
"La celebración de la solemnidad del Corpus de este año nos compromete a ver con mayor profundidad espiritual y apostólica el nexo íntimo que existe entre la Adoración eucarística, auténticamente amorosa y contemplativa, y una eficaz acción práctica a favor de nuestros hermanos necesitados, configurada como amor cercano y concreto".
Un amor, señaló, que "se revela como sólo capaz de sanar y de transformar profundamente las vidas de las personas y los estilos, costumbres y estructuras, socio-económicas, culturales e ideológicas, tan duras e inhumanas, en las que estamos inmersos".
Rouco Varela concluyó encomendando a la Virgen María "a tantos hermanos necesitados, material y espiritualmente" y haciendo un llamamiento para que se dé paso a "la civilización del amor".