(InfoCatólica) Ante el clima de violencia y malestar que sacudió a Costa Rica en las últimas semanas, con enfrentamientos callejeros que provocaron varios heridos, la Conferencia Episcopal de Costa Rica (Cecor) emitió un comunicado, titulado «Bienaventurados los que trabajan por la paz», en el que exhorta a buscar un diálogo constructivo. La demanda de los obispos fue escuchada por el presidente Carlos Alvarado, quien anunció la apertura de mesas de diálogo y convocó como garantes a la Iglesia Católica y otros actores.
Hoy 18 de julio han comunicado que se retiran de la mesa por haber cumplido el objetivo
«Hemos llegado a la convicción de que hemos cumplido plenamente con la solicitud de varios sectores sociales y del Gobierno de la República de acompañar el diálogo social entre las partes» escribe la Conferencia Episcopal costarricense a través de una nota en la que comunican el fin de su participación en el proceso de Diálogo Nacional. Además, expresan su confianza en que este proceso «se fortalezca y sea efectivo por sus acuerdos» y aseguran la continuación de Monseñor Javier Román Arias, Obispo de Limón con los transportistas y Monseñor Óscar Fernández Guillén, Obispo de Puntarenas, en el proceso con los pescadores.
En el comunicado también instan a que el objetivo fundamental sea «el bien común», que «resplandezcan la justicia y la paz social» y dan las gracias a Dios por la disposición de las partes «a ver en el diálogo, el camino para la solución de los conflictos».