(AGENCIA SIC) Con motivo del Día Mundial del Paludismo, Manos Unidas informa sobre el trabajo que lleva a cabo para hacer frente a esta enfermedad, que es uno de los principales problemas de salud mundial y que supone una de las principales causas de mortalidad infantil en África.
El último informe sobre paludismo de la Organización Mundial de la Salud (OMS) muestra que 216 millones de personas sufrieron esta enfermedad, y que el 90% de estos casos se produjeron en la región de África. Además, la malaria se ha cobrado la vida de 445 mil personas. El 91 % de estas muertes han tenido lugar en África, donde los niños menores de 5 años han sido los principales afectados.
¿Qué es la malaria?
La malaria o paludismo es una enfermedad humana que se transmite por medio de la picadura del mosquito del género Anophelesinfectado. Asimismo, esta enfermedad puede ser transmitida de manera congénita de la madre al feto, y por transfusiones sanguíneas.
Una esperanzadora realidad: ¿la vacuna que acabará con la malaria?
Tras 30 años de investigación, en estos días se ha iniciado el primer proceso de vacunación a gran escala contra la malaria con el que 360 mil niños serán inmunizados en Malawi, Ghana y Kenia, tres países donde esta enfermedad es congénita.
Pero en estos 30 años, organizaciones como Manos Unidas han estado trabajando para mejorar el acceso y las condiciones sanitarias de personas que viven en contextos vulnerables. La construcción de centros de salud, de hospitales, la aportación de equipamiento médico y la dotación de recursos, han sido los emblemas con los que se han combatido y se combaten las deficiencias y escasez sanitaria de aquellas regiones más pobres del globo.
En África, uno de los territorios más perjudicados por la enfermedad del paludismo, nos esforzamos en combatir esta y otras enfermedades, aunque somos conscientes de que el trabajo en el continente africano presenta grandes dificultades por la falta de infraestructuras, la falta de equipamiento y la escasez de recursos sanitarios. Sin embargo, estos factores han sido el motor de la organización para mejorar la calidad y las condiciones de vida en lugares del continente, como Malawi o Costa de Marfil.
Así Actuamos en el terreno…
Malaria, Costa de Marfil
Yamoussoukro, capital de Costa de Marfil, África del Oeste, una zona urbana desfavorecida carente de infraestructuras de saneamiento y de servicios de limpieza es un ejemplo del trabajo de Manos Unidas donde nuestro socio local, la Asociación Marfileña para la Formación Universitaria y Profesional, solicita la adquisición de equipamiento de laboratorio para mejorar la atención para el seguimiento y diagnóstico de muchas enfermedades, que siendo detectadas a tiempo no serían mortales, tal como es el caso de la malaria.
Los beneficiarios directos son unos 10.000 pacientes al año.
2017 | Costa de Marfil: 3.274.683 casos de malaria de los cuales 3.222 fueron mortales
Los beneficiarios del proyecto de equipamiento del centro son sobre todo mujeres, madres de familia analfabetas o con bajo nivel de escolarización sin participación en la vida pública, y sus maridos, pacientes con pocos recursos económicos, con poco nivel de estudios, de etnia dioula, parados o empleados como cocineros, chóferes, guardianes, lavanderos, mecánicos o realizando pequeñas actividades en sectores como agricultura, fontanería, carpintería.
Malawi, Hospital Kapiri
Otro ejemplo del trabajo realizado desde la organización en el sector sanitario se produce en Malawi, uno de los países más pobres del mundo donde la asistencia sanitaria es precaria y, donde, gracias a la ayuda de ONG internacionales y especialmente de Manos Unidas, se ha ido construyendo el Hospital Kapiri (Mtengo), convirtiéndose en uno de los mejores hospitales rurales que atiende a más personas del país.