(LifeSiteNews) Este 14 de febrero el Presidente Trump recibió en la Casa Blanca a Melissa Ohden, una mujer que sobrevivió a un aborto tardío, y a un niño de 6 años llamado Micah Pickering, quien nació de 22 semanas.
La Dra. Alveda King, sobrina del Dr. Martin Luther King, Jr., la activista pro-vida Christina Marie Bennett , la presidenta de Susan B. Anthony List, Marjorie Dannenfelser, y Katie Shaw, una defensora pro-vida en casos de Síndrome de Down también estuvieron allí. También asistieron la pastora Paula White y la familia de Alexander, cuya hija adoptiva, Katharine, nació con dependencia de opioides.
Trump también participó en una conferencia telefónica con defensores pro-vida. Se refirió a su discurso sobre el Estado de la Unión en el que condenó no solo la nueva ley de Nueva York que amplía los abortos hasta el nacimiento, sino también al gobernador de Virginia Ralph Northam, el demócrata que promovió el infanticidio de bebés recién nacidos durante una entrevista de radio.
Ohden sobrevivió a un aborto tardío cuando su madre llevaba 7 meses de embarazo. Más tarde, Ohden descubrió que su madre, que había sido obligada a abortar, lamentaba profundamente no haber hecho nada por salvar la vida de su bebé.
«Puedo decirles que en nuestra reunión privada con él, fue cálido, muy divertido, genuino, y sí, se interesó sobre algunas cosas, incluida la situación relacionada a la protección de la vida», escribió Ohden en Facebook sobre su reunión con Trump. «Fue un momento histórico, tener a la sobreviviente de un aborto fallido en la sala West Wing, y aunque desearía que otros sobrevivientes hubieran estado allí conmigo, puedo decir honestamente que pensé en ellos en todo momento, mi mayor esperanza es que este sea solo el primer paso para que los sobrevivientes sean reconocidos, incluidos y apoyados por la administración de Trump y quizás incluso por nuestra cultura más amplia».
«Hay muchas historias como la mía», dijo Ohden a LifeSiteNews en una entrevista reciente. «No estamos hablando de casos hipotéticos. No estamos hablando de circunstancias ambiguas. Estamos hablando de seres humanos».
La historia de Micah Pickering se utiliza para explicar la inhumanidad del aborto tardío: bebés con más semanas de gestación de las que tenía Micah cuando nació, son abortados legalmente en Estados Unidos.
«Con compasión y seguridad, el presidente Trump habló a miles de estadounidenses desde la Oficina Oval: “Muchas gracias y quiero agradecer a todas los miles de personas pro-vida y también a los líderes pro-vida, pastores, familias y militantes por unirse a este llamado y trabajar con amor y devoción para construir una cultura que valorela vida humana”, recordó la doctora King. Ella agradeció al presidente Trump por “su última acción a favor de vida” en el día de San Valentín, y escribió para Newsmax que “brille la luz y la esperanza para los bebes no nacidos y para aquellas personas que están injustamente atadas en otras situaciones de debilidad”».
«Fue reconfortante y alentador que el presidente y el personal de la Casa Blanca nos trataran con respeto y amabilidad», dijo Bennett a LifeSiteNews. Explicó que a principios de la semana, testificó a favor de los centros de embarazo y contra un proyecto de ley (HB 7070) contraria a ellos en una reunión del Comité de Salud Pública en Connecticut.
«Desafortunadamente, estoy acostumbrada a los funcionarios políticos que abogan por el abortoen mi estado, sin tener en cuenta mi historia de haber sido abortada y que atacan el trabajo de los pro-vida», dijo. «Es maravilloso saber que el presidente Trump cree que nuestra causa es digna y que nuestras historias merecen ser escuchadas».