(GP/Crux) Con los aportes de los feligreses de la parroquia de San Lorenzo en Tampa, Florida, Estados Unidos, se pudo terminar el primer templo católico edificado en Cuba tras la llegada del régimen comunista en 1959. Los fieles estadounidenses donaron cerca de 95 mil dólares, que permitieron construir un templo con capacidad para unas 200 personas.
«Ha sido increíble ver el templo que ha sido construido por una comunidad pequeña pero llena de fe en Sandino», comentó el P. Chuck Dornquast, Vicario Parroquial de San Lorenzo y que acompañó al párroco, de origen cubano, P. Ramón Hernández, en la dedicación del templo. Asistieron 500 personas, superando el aforo de la iglesia.
El templo del Sagrado Corazón en Sandino, Cuba, es el primero que se termina de construir, de los tres templos autorizados por las autoridades comunistas. Un segundo templo en La Habana ya está siendo empleado para el culto divino a pesar de estar sin terminar y el tercero está en las etapas iniciales de construcción, en la ciudad de Santiago. «Este es un evento histórico para la Iglesia», comentó Juan Hidalberto Hernandez, feligrés local, al diario Crux.
«Muchas familias y sus descendientes dejaron sus santos atrás y no tenían una iglesia en la cual orar», dijo el párroco, para quien el templo constituye «un puente entre Tampa y Cuba». La iglesia servirá a familias que hace tiempo fueron trasladadas al lugar desde la región de Escambray, donde se registró una fuerte resistencia al régimen comunista en los primeros años tras la revolución.
«Cristo ha hecho el llamado a hacer discípulos en cada uno de nosotros, independientemente de nuestras circunstancias», concluyó el P. Dornquast. «La gente en este pequeño pueblo de Cuba está encontrando una manera de vivir esa llamada, a pesar de sus difíciles circunstancias».