(AsiaNews). Aprender el idioma inglés y comenzar una nueva vida, independiente, dejando atrás una realidad en la cual las mujeres son «tratadas como objetos», se cuentan entre los motivos de una huida en la que «no tenía nada que perder». Son las primeras palabras pronunciadas en un encuentro con la prensa –desde su nuevo refugio, Canadá- por la joven saudita de 18 años, Rahaf Mohammed al-Qunun, que huyendo de la familia permaneció bloqueada por varios días en Tailandia, y a quien la ONU ha concedido el estatus de refugiada.
«Me mantuvieron encerrada durante seis meses –agrega- por haberme cortado el cabello. He padecido situaciones de violencia, mi padre y mi hermano me golpeaban». Luego de prometer luchar por la libertad y los derechos, la joven aclaró que su intención es llevar una vida normal. Sin embargo, la agencia humanitaria con sede en Toronto le ha proporcionado un guardaespaldas, temiendo una venganza de Riad.
Para ahondar en la historia de Rahaf, en la amplia cobertura que el caso han tenido en los medios internacionales y abordar el rol de la web y la situación de la mujer, AsiaNews se entrevistó con una intelectual musulmana, Nehal El Naggar. De nacionalidad egipcia, la mujer es docente de Literaturas comparadas en el Departamento de Civilización islámica de la American University de El Cairo, y es una personalidad destacada en el mundo académico local.
A continuación, transcribimos lo que ella nos ha contado:
El caso de Rahaf Mohammed al-Qunun, ¿puede servir de ejemplo para otras mujeres de Arabia Saudita, en su lucha por la libertad y los derechos? ¿Se repetirán casos similares?
Sí, creo que su historia puede ser tomada como ejemplo, y que otras jóvenes podrían repetirla, tanto en Arabia Saudita como en otras naciones. Una búsqueda de independencia que incluso podrá darse dentro de familias donde la libertad es reprimida y las jóvenes se ven privadas de sus derechos más básicos, incluyendo uno fundamental como es la educación. Al mismo tiempo, nadie puede prever si hechos como este habrán de repetirse en un futuro próximo o remoto.
¿Qué rol han jugado la web y las redes sociales en este caso? Un diplomático saudita ha dicho que tendrían que haberle secuestrado el celular, y no el pasaporte…
Absolutamente sí, las redes sociales –y en particular, Twitter- revelaron ser fundamentales para imprimir un rumbo a la historia, cubriendo un rol muy preciso. Sus tuits se han vuelto virales y le han permitido dar a conocer su historia al mundo, así como su lucha por la libertad y los derechos.
Casos como este, que testimonian hasta qué punto la mujer es objeto de represión, ¿hacen que crezca, simultáneamente, la conciencia de la lucha por los derechos?
Todos los días, en todo el mundo, si bien de maneras distintas y con variada intensidad, las mujeres son víctimas de la represión. Cabe decir, sin embargo, que cada vez hay mayor voluntad de luchar por los derechos en cada rincón del planeta y en naciones distintas. Al mismo tiempo, es evidente que la represión, la negación de derechos civiles y la privación de la libertad constituyen el principal signo, y el más evidente, de la debilidad de cualquier forma de autoridad. No solamente de los gobiernos, sino de cualquier «poder» civil o religioso.
Profesora, ¿Usted cree que las reformas que promueve el príncipe heredero Mohammad bin Salman en Arabia Saudita son reales o son meramente «de fachada»?
Siendo franca, yo creo que el programa que promueve MBS [acrónimo con el cual se identifica la número dos del reino wahabita] es un proyecto de reformas real y factible. Por cierto, este llevará tiempo, y no se puede decir cuánto tiempo se requerirá para que dé frutos y sea aplicado en cada uno de sus aspectos. Por otro lado, como sucede en cualquier otro país o cultura arraigada, los proyectos de reforma y los programas de cambio necesitan tiempo para ser asimilados sin generar grietas, divisiones, controversias y violencia.
Una de estas reformas es la llama «tutela masculina»: ¿podrá ser superada?
Pienso realmente que sí; un día, esta práctica será eliminada del reino saudita.
Concluyendo, en estos años marcados por las Primaveras Árabes, guerras y violencia en el Oriente Medio, ¿qué cosas han cambiado para la mujer?
¡Absolutamente! Estoy convencida de que muchos aspectos de la vida han cambiado, tanto para los hombres como para las mujeres, a partir, justamente de la Primavera Árabe. Hemos presenciado hitos históricos, algunos más exitosos que otros, que no pueden restringirse a categorías de género, sino que terminan abrazando a naciones enteras.
