(EP) Según declara la organización, el «miedo a la migración» ha llevado a los líderes de la UE a centrarse en «un mayor control fronterizo y la externalización de las políticas de asilo y migración de la Unión». «Lamentamos que las propuestas de los líderes de la UE se basen en temores irracionales más que en hechos», subraya.
Además, cita cifras recientes que «muestran que las solicitudes de asilo en la UE han disminuido en un 44 por ciento en 2017» y que «las llegadas a las costas italianas han disminuido drásticamente».
Mientras tanto, advierte, «las necesidades de protección en todo el mundo nunca han sido más altas: 68,5 millones de personas se vieron obligadas a abandonar su hogar en 2017, lo que equivale a 44.400 personas vulnerables por día».
Para Cáritas, lo «justo y racional» sería que los líderes de la UE «asumieran con fuerza un liderazgo mundial para promover un sistema justo y humano de migración y asilo», teniendo en cuenta que el 85 por ciento de los refugiados están alojados en países en desarrollo.
Garantizar vías seguras de acceso
«Deben garantizarse vías seguras y legales hacia Europa, incluido el reasentamiento, en lugar de intentar sellar las fronteras de la UE», afirma la directora de Incidencia Política de Cáritas Europa, Shannon Pfohman.
Además, sobre la plataforma regional de desembarco, Cáritas avisa de que «la trampa puede estar en los detalles». «El establecimiento de un mecanismo regional de desembarco nunca debe conducir a la creación de centros de procesamiento offshore según el patrón australiano, pues han demostrado ser contrarios a los derechos humanos», subraya Pfohman.
En su lugar, cree que los Estados miembros de la UE deberían trabajar por un mecanismo basado en los derechos que mejore la cooperación en las operaciones de búsqueda y rescate «para evitar que se repitan dramas como el vivido con el Aquarius».
Asimismo, sobre la importancia de la cooperación con terceros países en la lucha contra la migración irregular, la organización ha indicado que «nunca debería hacerse a costa de la vida de las personas».