(ND) «No podrá estar mucho tiempo así. No puede matar y aislar a todo un pueblo. Soy consciente de que este es un diálogo muerto, ya que el interlocutor es inhumano», dijo Mata.
Según reseñó La Prensa de Nicaragua, el obispo nunca estuvo muy favor del diálogo. No obstante, reconoció que es el único camino para conseguir la paz que el país necesita.
«En lo personal me opuse a este diálogo porque ya he hecho ese camino con esta gente cínica y mentirosa. Pero el recurso al diálogo es un instrumento para ir orillándolo ante la nación y ante la comunidad internacional. En el fondo, este malvado hombre y su equipo van hacia su salida sangrienta», acotó el también obispo de la diócesis de Estelí.
La Conferencia Episcopal de Nicaragua suspendió temporalmente el proceso de diálogo ante el incumplimiento de Daniel Ortega de permitir la entrada de organismos internacionales para que «revisen» la situación que está viviendo el país. Mientras tanto, continúan las manifestaciones de calle.
Según la Asociación Nicaragüense Pro Derechos Humanos (ANPDH) este martes 19 de junio ocurrió un ataque en la ciudad de Masaya por parte de fuerzas «combinadas» compuestas por policías, antimotines, «parapolicías», «paramilitares» y fuerzas de choque oficialistas que dejó, al menos, seis personas muertas y 35 heridas por armas de fuego.
El obispo aseguró que hace falta «sabiduría, perseverancia y corazón» ante lo que está ocurriendo en Nicaragua.