(Fides) En una carta a los fieles de su archidiócesis, Mons. Neri afirma que: «En este contexto, sobre todo de cara a las elecciones generales, debemos esforzarnos por conocer mejor nuestra Constitución y hacer más para protegerla», escribe el arzobispo en la misiva difundida el pasado 4 de junio en Goa, donde los católicos representan el 26% de la población de entre un millón y medio de habitantes.
«En los últimos tiempos, vemos una tendencia que está cobrando fuerza en nuestro país: se quiere imponer una especie de uniformidad sobre qué y cómo comer, vestirse, vivir e incluso a cuál Dios adorar. Es una especie de monoculturalismo: los derechos humanos están siendo atacados y la democracia parece estar en peligro».
El prelado dijo que las minorías religiosas temen por su seguridad y que las personas están siendo desplazadas de sus tierras y de sus casas en nombre del desarrollo. «Las primeras víctimas son los más pobres, porque es más fácil pisotear los derechos de los pobres ya que muy pocos alzan la voz por ellos», escribe monseñor Filipe Neri Ferrao.
Turbulenta atmósfera política y ataques a la minoría cristiana
La carta del arzobispo llega después de otra escrita en las últimas semanas por el arzobispo de Delhi, monseñor Anil Couto, que ha generado polémica al señalar «la turbulenta atmósfera política» que, según el arzobispo, pone en peligro a la democracia y a la laicidad del estado. Monseñor Couto ha invitado a todos los sacerdotes a «rezar por el país» antes de las elecciones de 2019. En la carta, leída en todas las iglesias de Delhi, asegura que espera que «el espíritu de la verdadera democracia esté presente en nuestras elecciones».
Las minorías religiosas en la India expresaron su preocupación por los crecientes ataques de extremistas hindúes, una tendencia que se ha agravado en estos cuatro años del gobierno del primer ministro Narendra Modi, del Partido Bharatiya Janata (BJP). Los nacionalistas hindúes criticaron la carta de monseñor Couto asegurando que contribuye a polarizar el país. Los cristianos representan solo el 2% de la población de la India (un total de 1.300 millones de personas), que es predominantemente hindú (80%), pero tiene una importante minoría musulmana (14%).