(AsiaNews) El árbol de Navidad construido el año pasado en la zona de Galle Face Garden de Colombo fue colocado en el Guinness World Record como el árbol artificial más alto del mundo. El 13 de diciembre Arjuna Ranatunga, ministro de los puertos y de la pesca y entre los mayores financiadores de la iniciativa, entregó el certificado a Ranil Wickremasinghe, Premier de Sri Lanka. Este último a su vez agradeció a «todas las personas, prescindiendo de las diferencias religiosas, que han hecho posible la realización del árbol más alto del mundo. Este se eleva como símbolo de paz y unidad».
El año pasado la construcción del árbol, alto 72,1 metros, estuvo acompañada por numerosas críticas y polémicas, sobre todo por la dirigencia de la Iglesia católica local, que los definieron como un desperdicio de dinero. Este fue financiado por un grupo de budistas, capitaneados por la Foundation of Social Services del ministro Ranatunga, ex capitán del equipo de cricket de Sri Lanka.
Durante la ceremonia de entrega del primado, el Premier Wickremasinghe subrayó que «si bien Sri Lanka es un país de mayoría budista, este demostró al mundo que todas las religiones son respetadas en la misma manera». Luego elogió al grupo de constructores, por su «trabajo incansable y por el compromiso para lograr este record mundial».
La estructura fue encendida el 23 de diciembre de 2016 e iluminó la capital hasta el 31 de diciembre. El esqueleto del árbol estaba formado por una maraña de cables de acero, revestido de cortezas y piñas naturales. El proyecto costó 11 millones de rupias (casi 61 mil euros). Su creador, Mahinda Nanayakkara, budista, afirma con satisfacción a AsiaNews: «Estoy contento de haber llevado el nombre de mi país al libro del Guinness World Record, gracias a mi capacidad de innovación y al espíritu de grupo».