(InfoCatólica) Tal presión, aseveró el cardenal, se puede ver en los esfuerzos para permitir que los católicos divorciados y vueltos a casar puedan comulgar sin que se haya producido una nulidad matrimonial o hayan decidico abstenerse de mantener relaciones sexuales con su nueva pareja
Los antiguos principios de la unidad y la indisolubilidad del matrimonio no pueden ser comprometidos para acomodarse a «las tendencias modernas», dijo el purpurado.
«En un mundo donde existe una la laxitud moral generalizada, la Iglesia de Dios no puede abdicar de su responsabilidad de mantener los altos estándares del Evangelio del Señor Jesucristo», dijo el cardenal Onaiyekan a los católicos reunidos para el congreso.
En cuanto a la exhortación apostólica Amoris Laetitia, el prelado africano la interpreta conforme al Magisterio previo de la Iglesia y asegura que el Papa Francisco planteó la cuestión de los católicos que están en situaciones problemáticas, pero sin cambiar la norma. El Papa pretende animar a las personas que están en dificultades para que entiendan que la iglesia está al tanto de sus cargas y luchas y que nadie está excluido de la misericordia de Dios. Pero, recuerda el cardenal, la misericordia divina no reemplaza ni cancela las leyes de Dios ni las normas de la iglesia.
Con información del Catholic Herald