(LSN/InfoCatólica) Los católicos tradicionales en Estados Unidos han formado un «ecumenismo de odio» con los protestantes evangélicos en su apoyo conjunto al presidente de los Estados Unidos, Donald Trump y sus políticas, ha afirmado la revista jesuita italiana «La Civiltà Cattolica» en una publicación que es revisada por el Vaticano antes de su publicación.
El artículo publicado el 13 de julio en La Civiltà Cattolica afirma que algunos católicos tradicionales de Estados Unidos han establecido lazos con fundamentalistas evangélicos con fines políticos que evidencian «enormes diferencias» con el Papa Francisco.
«Apelando a los valores del fundamentalismo, se está desarrollando una extraña forma de ecumenismo sorprendente entre fundamentalistas evangélicos y integristas católicos unidos por la ambición de obtener influencia religiosa en la esfera política», dice el artículo.
«Algunos que profesan ser católicos se expresan de maneras que hasta hace poco eran desconocidas en su tradición y usan tonos mucho más cercanos a los evangélicos».
«Existe un mundo bien definido de convergencia ecuménica entre sectores que paradójicamente son competidores en lo que respecta a la pertenencia confesional. Esta unión sobre los objetivos compartidos se produce en torno a temas como el aborto, el matrimonio entre personas del mismo sexo, la educación religiosa en las escuelas y otros asuntos generalmente considerados morales o ligados a los valores. Los integristas evangélicos y católicos condenan el ecumenismo tradicional y, sin embargo, promueven un ecumenismo de conflicto que los une en el sueño nostálgico de un tipo de Estado teocrático», añade.
Los autores del informe son dos de los estrechos asesores del Papa Francisco, el editor en jefe de la revista, el P. Antonio Spadaro y Marcelo Figueroa, pastor presbiteriano argentino que lidera la edición de su periódico del Vaticano, L'Osservatore Romano.
Spadaro y Figueroa afirman que la «perspectiva más peligrosa para este extraño ecumenismo» es una «visión xenófoba e islamofóbica que quiere levantar muros y limitar las deportaciones».
«La palabra ecumenismo se transforma en una paradoja, en un ecumenismo del odio», afirman los escritores.
«Claramente hay una enorme diferencia entre estos conceptos y el ecumenismo practicado por el Papa Francisco con varios cuerpos cristianos y otras confesiones religiosas. Es un ecumenismo que se mueve bajo el impulso de la inclusión, la paz, el encuentro y los puentes», añaden los autores.
Los escritores nombran específicamente al servicio de noticias católico de los Estados Unidos Church Militant dirigido por Michael Voris como un ejemplo de lo que ellos llaman un «enfoque combativo y militante» de llevar la teología a la política.
«Francisco quiere romper el vínculo orgánico entre cultura, política, institución e Iglesia. La espiritualidad no puede vincularse a los gobiernos o pactos militares porque está al servicio de todos los hombres y mujeres. Las religiones no pueden considerar a algunas personas como enemigos jurados ni a otros como amigos eternos. La religión no debe ser el garante de las clases dominantes. Sin embargo, es esta muy dinámica con un sabor teológico espurio que trata de imponer su propia ley y lógica en la esfera política», escriben.
Reacciones
El blog católico tradicional Rorate Caeli calificó al artículo «sin precedentes» en su «extralimitación».
«Debido a su naturaleza sin precedentes y al ataque directo que hace a Estados Unidos, su actual administración (incluyendo al Presidente Trump y Steve Bannon, uno de los más altos asesores del presidente), a evangélicos y a católicos conservadores en Estados Unidos y África, preocupados por el surgimiento del islamismo, e incluso mencionando un sitio web específico y una persona (Church Militant y Michael Voris), los excesos a los que ha llegado este artículos no pueden ser calificamos menos que de impresionantes», afirmó el blog.
El corresponsal del Vaticano, Francis Rocca, dijo que es «improbable» que los autores hubieran escrito el artículo sin la «aprobación, presunta o explícita» del Papa.