(Actuall/InfoCatólica) Planned Parenthood es la mayor multinacional abortista del mundo, y lo es básicamente porque se ha especializado en realizar abortos por mucho que esta Fundación, con su presidenta Cecil Richards a la cabeza, intenten vender la idea de que ofrecen servicios de salud.
Es decir, intentan dar un sentido más amplio al concepto de «salud reproductiva» del que tanto presumen con otros servicios como cuidados prenatales, pruebas para detectar el cáncer de mama, prueba de Papanicolaou o el tratamiento del Virus del Papiloma Humano.
Sin embargo las cifras desmienten sus alegatos y muestran que el único servicio de Planned Parenthood que no ha descendido en los últimos años ha sido el aborto, mientras que el resto -todos- han bajado con porcentajes de hasta un 60%.
Causas
Y esto no se debe a que ya no haya gente que necesite este tipo de pruebas, sino que las personas, en concreto las mujeres, prefieren acudir a otros centros de «salud reproductiva» en los que les atienden mucho mejor y de manera más eficiente cuando se trata de asuntos que no son el aborto.
Es más, en los últimos cinco años el número de pacientes de Planned Parenthood ha descendido de 3 millones de 2,5 millones. O dicho de otra manera, se trata del 2,4% de toda la población femenina de EEUU de entre los 15 y los 65 años.
Dicho de otra manera, desde que Cecil Richards fue nombrada presidenta en 2006, esta multinacional ha perdido de media 670.000 pacientes al año.
Y sin embargo, la asignación que el gobierno de Barack Obama otorgó a esta Fundación se incrementó en un 14% entre 2010 (487.4 millones de dólares), y 2014 (553.7 millones de dólares).
Lo mismo que le ocurrió al sueldo de Richards, la presidenta, solo que con un porcentaje mayor, un 228%, pasando de cobrar 420 mil dólares anuales en 2010, a 957 mil dólares anuales en 2014.
Los datos expuestos en estos gráficos están sacados de las cuentas anuales de la propia Planned Parenthood.
Cifras
Como se ve en el gráfico, el número de mujeres que utilizaron las instalaciones de la multinacional abortista para hacerse una prueba de detección de cáncer de mama pasó de 747.706 en 2010, a 363.803 en 2014, un 51,3% menos.
Lo mismo ocurre con la prueba del Papanicolaou. Hasta un 64,7% menos en apenas cuatro años, y eso que en todo EEUU se realizaron hasta 1,8 millones de pruebas en 2014, de las cuales PP fue responsable sólo de 271,539.
En cuanto a los cuidado prenatales, del total de pacientes en EEUU -552.150-, Planned Parenthood proporcionó unos 17.149 servicios prenatales (que no pacientes). Esto significa entre otras cosas que aquellos centros que ofrecen cuidados prenatales que no son PP, trajeron 292.286 bebés vivos al mundo. Planned Parenthood no trajo ninguno, pero a cambio abortó a 323.999.
De nuevo, lo mismo ocurre con el virus del Papiloma Humano, aunque el porcentaje sea menor -un descenso de un 37% en cuatro años-. Se pasa de 51.197 casos a 32.233.
Todo baja en estos años en Planned Parenthood, todo menos los abortos, que se mantienen a lo largo de los años a pesar de que en número de abortos total en EEUU viene cayendo desde 1990 (excepto los años 1996 y 2006).
Según empezaron a caer el número de abortos en Estados Unidos desde su punto álgido en 1990, la multinacional abortista tomó el camino inverso y vio como sus casos aumentaban.
Sobre todo con Bill Clinton en el poder, y después con Barack Obama. Así, en 2010, realizó hasta 329.445 abortos ese año, cifra un poco menor en 2014 pero por poco: 323.999.
Este es el gran negocio de Planned Parenthood, al que se dedica y con el que logra sus grandes ingresos, amenazados ahora por Donald Trump. Un negocio que entre el presidente de EEUU y los escándalos de los vídeos en los que se ven a directivos abortistas vender partes de bebés recién asesinados, puede tener sus días contados.