(Asia News) El pasado febrero, un jefe de un pueblo rechazó oficiar el servicio fúnebre de un miembro difunto de la comunidad local, a causa de su preferencia política por “Ahok”, durante la primera Pilkada. Un episodio sucedido el 9 de marzo, en el mismo complejo residencial, suscitando indignación de los musulmanes moderados indonesios.
Lukman Hakim Saifuddin, ministro indonesio de Asuntos religiosos, expresó, el pasado 11 de marzo, gran preocupación por los mensajes de odio religioso lanzados por algunos grupos islámicos radicales. La declaración del ministro siguen a la apertura, por parte de la policía, de una investigación referida a la colocación, en diversas mequitas de Yakarta, de manifiestos y carteles que invitan a los fieles a no seguir los ritos fúnebres de todos los musulmanes seguidores del candidato a gobernador cristiano.
El ministro Saifuddin, político del partido islámico United Development Party (Ppp), sostuvo que tales invitaciones no son «islámicas», por cuanto que «rezar por los difuntos y realizar los ritos fúnebres es un acto legalmente y moralmente debido y es fardu Kiyafa (obligación moral que toca a cada musulmán, ndr)». «Si cierta localidad rechaza cumplir esta obligación moral, entonces el resultado es claro, los musulmanes de la zona están cometiendo pecado-dijo el ministro.
Saufiddin es una figura destacada de la más grande y más moderada organización musulmana del país: la Nahdlatul Ulama (UN). Él invita a todos los habitantes musulmanes de Yakarta a no realizar gestos de intolerancia contra personas y familias cuyas preferencias políticas sea diversa de la de ellos o simplemente porque han votado por «Ahok» durante el primer turno de las Pilkada, el pasado febrero.