(ACI/InfoCatólica) Luego de las declaraciones de la Policía de Uruguay que reconoció que la ley de marihuana vigente desde 2013 ha aumentado el narcotráfico y la criminalidad, el diputado del Partido Nacional, Carlos Iafigliola, expresó que seguirán «combatiendo esta mala ley, y otras que atentan contra la familia y la vida, hasta que caiga».
El 7 de marzo el Director Nacional de Policía de Uruguay, Mario Layera, en el programa La Mañana de radio El Espectador, afirmó que en 2016 el país registró «los más altos niveles de incautación históricos de marihuana».
Con lo anterior, explicó Layera, se comprueba el aumento de la tasa de delincuencia y homicidios, sobre todo por la lucha de territorios por parte de los grupos narcotraficantes.
Las cifras
De acuerdo a los datos entregados por la Brigada de Narcóticos local, la droga más incautada en 2016 fue marihuana, con una confiscación de 4.305 toneladas hasta el 18 de diciembre (2.52 toneladas en 2015), seguida de la cocaína con 144.4 kilos.
Antecedentes
En 2013, el entonces Presidente de Uruguay, José Mujica, aprobó la ley que regula el cultivo, distribución, venta y consumo del cannabis (marihuana) con el argumento de que este «experimento sociopolítico» iba a combatir el narcotráfico.
La ley permite la producción de marihuana en el sector privado bajo control estatal, el cultivo hogareño para autoconsumo, la formación de clubes de siembra cooperativa y la venta en farmacias. Este último punto aún no se ha implementado debido a problemas logísticos.
El diputado Iafigliola conversó con ACI Prensa y explicó que lo que logró la ley fue «transmitir el mensaje de que si es legal no debe ser tan malo. Entonces se liberalizó el consumo y la sociedad y la juventud sobre todo, quedó mucho más expuesta».
«Una ley de este tipo no soluciona nada. Si querían frenar el ingreso de sustancia y el avance de la drogadicción debían colocar medidas represivas y restrictivas, no facilitando cosas como éstas».
«Esta es una muy mala ley que junto con otras que impulsó Mujica como la de aborto que atenta contra la vida, la integridad física de quienes vivimos aquí y la familia; seguiremos combatiendo hasta que caiga y lo que se haga realmente sea represión y mayores cuidados».