(Teletica) «Yo he pedido que el tema (de las pandillas) no se arrincone, que busquemos salidas. La violencia no es la solución, el fuego no se apaga poniendo más gasolina (..)», declaró Mons. Rosa Chávez durante una rueda de prensa luego de oficiar la misa dominical en la catedral de la capital.
Las pandillas, que la policía y fiscalía buscan contener con operaciones diarias, solicitaron por medio de la prensa local un diálogo que les permita disolverse con programas de reinserción.
«Las pandillas es un tema real. La desconfianza es normal que exista, pero hay que hacer algo porque el problema está causando víctimas mortales todos los días y mucha angustia en la población», comentó.
El obispo lamentó que «por el momento se está hablando el lenguaje de las armas» con lo cual el país está «contando muertos todos los días».
Las pandillas, que extorsionan a comerciantes y particulares, son consideradas las principales causantes de la violencia criminal que agobia al país.
De ellas forman parte unos 70.000 miembros, de los cuales poco más de 16.000 están encarcelados con severas medidas para evitar que sigan ordenando crímenes.
El Salvador registró en 2016 un promedio de 80 homicidios por cada 100.000 habitantes, lo que convierte al país en una de las naciones sin guerra más violentas del mundo.
La cifra rebasa el promedio de 10 homicidios por 100.000 habitantes que la ONU cataloga como violencia endémica.