(Protestante Digital) Se ordenó a Nadarkhani que acudiese a la sección 13ª del Tribunal Revolucionario de Rasht el pasado 24 de julio, donde fue acusado y puesto en libertad, pero se le dio una semana para recaudar 100 millones de touman de fianza (moneda nacional que equivale aproximadamente a 33.000 dólares o 30.000 euros) para evitar ser arrestado. También fue acusado de ser sionista y se le informó que no tenía derecho a evangelizar.
Ya el pasado 13 de mayo, el pastor y su esposa, Tina Pasandide Nadarkhani, fueron detenidos después que agentes del Servicio de Seguridad de Irán (VEVAK) allanaran su casa en Rasht como parte de una actuación contra unos diez hogares cristianos.
Aunque el matrimonio fue puesto en libertad de inmediato, tres miembros de su congregación, Mohammadreza Omidi (Youhan), Yasser Mossayebzadeh y Saheb Fadaie, quedaron detenidos en la prisión de Rasht Lakan y luego puestos en libertad tras pagar una fianza por valor de aproximadamente US $ 33.000. Los tres hombres aún no se han informado de los cargos presentados contra ellos.
Mervyn Thomas, presidente ejecutivo de la Christian Solidarity Worlwide (CSW, ONG cristiana de defensa de la libertad religiosa y los derechos humanos) explica la situación:
«Es muy preocupante este acoso renovado contra el Pastor Nardarkhani. Los cargos de atentar contra la seguridad nacional son falsos e indican que las autoridades insisten en castigar a la comunidad cristiana por ejercer su derecho a la libertad religiosa o de creencias. Instamos al gobierno iraní para desestimar los cargos en su contra y a cancelar los cargos pendientes contra Mohammadreza Omidi, Yasser Mossayebzadeh y Saheb Fadaie. La comunidad internacional debe presionar al gobierno de Irán para cumplir con sus obligaciones de respetar el derecho de sus ciudadanos a la libertad de religión o de creencia, como se indica en el Pacto Internacional de Derechos Civiles y Políticos, del que es signatario, y en la propia Constitución de Irán».
Perseguido desde el 2009
La historia de Nardarkhani se remonta a 2009, cuando fue detenido tras acudir a la escuela de sus hijos a cuestionar la imposición de la educación religiosa musulmana a todos los alumnos, por considerarlo inconstitucional. Fue acusado de apostasía y condenado a muerte en 2010, una decisión que fue confirmada por el Tribunal Supremo en 2011.
El 8 de septiembre de 2012 fue puesto en libertad tras ser absuelto del cargo de apostasía, pero declarado culpable por evangelizar. El pastor fue llevado a prisión el 25 de diciembre de 2012 para completar el resto de su condena de tres años, y fue puesto en libertad una vez más el 7 de diciembre de 2013.
