(Gaudium Press/InfoCatólica) El Cardenal Timothy M. Dolan, Arzobispo de Nueva York, y Mons. William Lori, Arzobispo de Baltimore, escribieron una carta conjunta a los legisladores de la Cámara de Representantes de Estados Unidos para solicitar la aprobación de una norma que proteja el derecho de objeción de los ciudadanos ante el aborto. Los prelados urgieron a los representantes, ya que «nuevas y preocupantes acciones para forzar a los proveedores de servicios de salud a participar en la destrucción de la vida humana claman por un remedio federal inmediato».
Los prelados realizaron esta acción como Presidentes de los Comités de Actividades Provida y Ad Hoc para la Libertad Religiosa de la Conferencia de Obispos Católicos de Estados Unidos respectivamente. El primer ejemplo de coerción abortista presentado es la disposición del Departamento de Salud Administrada de California que obliga a todos los planes de salud bajo su jurisdicción a cubrir abortos inducidos, incluyendo los de abortos tardíos.
El segundo ejemplo que sustenta la urgencia de la norma es la implementación en el estado de nueva York de una normativa similar aplicada a todos los empleadores de grupos pequeños. «Incluso las Iglesias y las organizaciones religiosas podrían recibir la exigencia de cubrir algunos abortos en violación de sus creencias», alertaron los prelados. Finalmente el pasado 21 de junio una Corte en el estado de Washington ordenó a todos los hospitales públicos con servicios de maternidad a realizar abortos, incluso si son adquiridos por un proveedor de salud católico.
Los prelados aclararon que «incluso quienes están en desacuerdo sobre el asunto del aborto deberían ser capaces de respetar a quienes no desean participar en el aborto» y pidieron «defender los derechos a la vida y la libertad que nuestros padres Fundadores sabiamente declararon como los más fundamentales para la existencia de nuestra nación».