(ACI) Así lo indicó el Obispo en una reciente homilía en la que resaltó que este aniversario patrio coincide con la fiesta de Nuestra Señora de Itatí, patrona de la Diócesis de Posadas, advocación mariana «antigua y querida por el pueblo de Dios» de la zona noreste de Argentina en el límite con Paraguay.
«Los santuarios marianos como el de Itatí (…) y tantas manifestaciones de fe expresan la actualidad y la memoria de siglos. Sin esta dimensión religiosa y mariana toda proyección de nuestra Patria quedaría vaciada de un aspecto esencial de su matriz cultural», dijo el Prelado.
El Obispo de Posadas expresó que «sería grave e iría contra el sentir de nuestro pueblo excluir la religiosidad del catolicismo popular y la devoción mariana de los argentinos» en la celebración patria.
«Siempre aparecen algunos militantes ligados a elites distanciadas de la realidad que buscan solitariamente realizar un análisis secularista, y a veces anti-católico de nuestra historia, que en general carecen de incidencia en el caminar ordinario de nuestro pueblo», explicó.
Mons. Martínez encomendó a la Virgen María «todas las preocupaciones e inquietudes en el caminar evangelizador que realizamos en la Diócesis, con la certeza que dicha evangelización implica un servicio de humanización y aporte de valores fundamentales a nuestra cultura».
El 9 de julio, a las 00:00 horas repicarán las campanas de la Catedral de Buenos Aires y a las 11:00 a.m., el Arzobispo porteño, Cardenal Mario Aurelio Poli, presidirá la Misa de acción de gracias con el canto del Tedeum.
Las celebraciones del Bicentenario en otras ciudades en la página de AICA
Nuestra Señora de Itatí
Miles de peregrinos visitan la imagen de Nuestra Señora de Itatí cada 9 de julio, tallada en madera timbó y nogal, ubicada cerca al Río Paraná en la provincia argentina de Corrientes.
La tradición cuenta que la imagen fue encontrada en el río Paraná por un grupo de indios. Estos vieron a la Virgen Inmaculada sobre una piedra rodeada de una luz muy brillante. Fray Gámez ordenó el inmediato traslado de la figura pero la imagen desapareció en dos ocasiones, retornando a su lugar cerca del río.
Al comprender la «voluntad de la Santa Madre» trasladaron el asentamiento a ese lugar que empezó a llamarse Itatí que viene de la lengua guaraní y significa «piedra blanca».
Los milagros y las curaciones son incontables, por lo que el 16 de julio de 1900, la imagen fue coronada por voluntad el Papa León XIII. Fue entronizada con el nombre de Reina del Paraná y reina del Amor.
El 3 de febrero de 1910, el Papa San Pío X creó la diócesis de Corrientes y el 23 de Abril de 1918, la Virgen de Itatí, fue proclamada Patrona y Protectora de la misma.