(Actuall/InfoCatólica) La Cámara Baja del Parlamento irlandés (Dáil) ha rechazado este jueves un proyecto de ley encaminado a permitir el aborto cuando el feto presenta las mal llamadas «anomalías mortales».
La propuesta legislativa, que fue presentada por el diputado independiente Mick Wallace, obtuvo el respaldo de 45 parlamentarios, frente a los 95 que votaron en contra.
El debate de este proyecto de ley ha divido al Gobierno irlandés, liderado en minoría por el conservador Fine Gael con el apoyo de diputados independientes, tres de los cuales dijeron «sí» a la reforma de la legislación vigente.
El Ejecutivo del primer ministro, el democristiano Enda Kenny, promulgó en la anterior legislatura, cuando gobernó en mayoría con el Partido Laborista, la primera ley sobre el aborto de la historia de la República de Irlanda.
Desde 2014, la nueva legislación legalizó el crimen del aborto si se alega que la vida de la madre corre peligro, lo que incluye la amenaza de suicidio por parte de la mujer, informa Efe.
Sin embargo, el aborto sigue sin ser legal en casos de violación e incesto y están previstas penas de cárcel para las mujeres y los profesionales de la industria del aborto que lo realicen.
El presidente promete abrir el debate
A pesar de votar hoy en contra, Kenny se ha comprometido a establecer una «asamblea ciudadana» para analizar este delicado asunto y estudiar la posibilidad de introducir cambios en la ley.
El «Taoiseach» (primer ministro irlandés) ha recordado también que la Fiscalía del Estado consideró que el proyecto de ley presentado por el diputado Wallace es anticonstitucional, por lo cual, cualquier reforma deberá efectuarse a través de los canales apropiados.
Tras la derrota en el Dáil, Wallace ha confirmado que llevará su «Proyecto de Ley sobre Anomalías del Feto Mortales» ante el Tribunal Supremo para que la más alta instancia judicial del país decida si es anticonstitucional.
«No decimos que tengamos la razón al cien por cien, pero dejemos que decida la justicia», argumenta el parlamentario.
El Servicio de Sanidad irlandés (HSE) informó el pasado mayo de que el número de mujeres que abortan en el Reino Unido se «ha estabilizado» desde 2007, a pesar de que casi 3.500 viajaron al país vecino para terminar sus embarazos en 2015.