(RV/InfoCatólica) Marie Duhamel entrevista a mons. Guido Pozzo sobre el comunicado hecho público por la Fraternidad de San Pío X. ¿Lo interpreta como una interrupción del diálogo en curso?
La Comisión «Ecclesia Dei» no considera que sea una interrupción del dialogo: el comunicado no parece que entre en el fondo de las cuestiones concretas que son objeto de diálogo y discusión entre la Pontificia Comisión «Ecclesia Dei» y la Fraternidad de San Pío X. Por tanto, debe proseguir el diálogo sobre esas cuestiones concretas.
¿Como interpreta este comunicado?
No dice nada nuevo respecto a la posición bien conocida de la FSSPX respecto a la situación actual de la Iglesia. Puedo añadir, incidentalmente, respecto a la falta de reconocimiento canónico, que éste es condición esencial para que una obra católica esté en plena comunión eclesial, de acuerdo con el derecho. No hay reconocimiento canónico, estamos trabajando para que lo llegue.
Ellos hablan de distintos asuntos clave, sobre los que trabajan conjuntamente...
Se trata siempre de las mismas cuestiones de tipo doctrinal y disciplinar: las que se refieren al Magisterio, la tradición, las del Vaticano II... Pero son todas ya conocidas y no hay necesidad de volver a enumerarlas.
El Papa recibió al superior de la Fraternidad, mons. Fellay, hace poco tiempo. ¿Cuál es la frecuencia de estos encuentros director o indirectos?
No tienen una periodicidad fija. Los encuentros tienen lugar entre los miembros de la Comisión «Ecclesia Dei» o nuestros delegados y los representantes de la FSSPX. Ha sido, no obstante, un encuentro importante: una audiencia privada con el Santo Padre, en la que mons. Fellay pudo exponer sus puntos de vista al Santo Padre. Fue un encuentro muy cordial y desde luego está dentro del camino de diálogo y sobre todo de confianza recíproca que juntos estamos construyendo. Así que no se descarta que pueda haber otros encuentros, pero éstos no están ya programados...
Benedicto XVI apreciaba mucho este trabajo para poder alcanzar a la unidad con la Fraternidad. ¿Tiene el Papa Francisco la misma visión?
Sí, con toda seguridad. El Papa Francisco lleva en el corazón la unidad de la Iglesia y todo lo que pueda favorecerla. Él está siempre muy dispuesto a lograrla, y esto creo que también lo ha percibido mons. Fellay. Pero no podemos negar, evidentemente, que todavía hay problemas por resolver, por afrontar, por examinar.
Así pues, por parte de la Santa Sede hay apertura, pero firmeza...
Hay firmeza sobre lo que es esencial para ser católico. En esto no hay cambio alguno. Pero no creo que nos enfrentemos a una cuestión de firmeza. Se trata, más bien, de afrontar los problemas concretos, resolverlos y resolveros juntos. La apertura va en este sentido: en el sentido de que hemos identificado los problemas concretos a afrontar y de que los estamos afrontando. Esto llevará tiempo, naturalmente, así como una recíproca disponibilidad.