(Asia News) El video dura unos veinte minutos. En el mismo, aparecen veintitrés jovencitos (llamados «cachorros del califato»), algunos de los cuales provienen de Malasia y de Filipinas. En las frases de propaganda que pronuncian hay amenazas dirigidas a los Estados del Sudeste asiático, que «no lograrán vencer» a los milicianos del EI.
Según Ridlwan Habid, experto en inteligencia y terrorismo de la University of Indonesia, la buena calidad de las imágenes y del sonido indica que el video es original. La presencia de niños de varias nacionalidades atestigua que fue filmado en Siria. «La Oficina de inmigración- dijo- debería evaluar seriamente el hecho de que tantos niños indonesios lograron entrar a Siria».
Las autoridades están preocupadas por la gran difusión que la filmación ha tenido en internet y por la influencia que ésta pueda tener sobre las nuevas generaciones: «Es un hecho grave y lo lamentamos», dijo Brig Amar Joey Boy, jefe de Relaciones Públicas de la policía. «Ya todo puede ser compartido y cualquiera puede hacer propaganda online». Yakarta está pensando en cerrar las fronteras a las llegadas de Siria, como un modo de bloquear el retorno de los milicianos adiestrados.
Desde hace tiempo el EI está activo también en territorio indonesio. Los atentados de enero pasado en Yakarta, estarían relacionados con un grupo terrorista ligado al EI que trata de tener el predominio en las franjas yihadistas del sudeste asiático.
Los simpatizantes del EI en Indonesia serían unos mil: un número pequeño, si se piensa que ese país musulmán es el más poblado del mundo, con unos docientos seis millones de habitantes y fieles al islam (el 87%). Hasta ahora, los que partieron hacia Siria para unirse al Califato, serían unos seiscientos. De éstos, cincuenta ya estarían muertos. Según la Agencia para el anti-terrorismo (BNPT), en cambio, serían ciento cuarenta los ciudadanos que ha ya han regresado de Medio Oriente.