(PortaLuz) El pasado 17 de marzo la presidenta chilena Michele Bachelet lograba el respaldo de la Cámara de Diputados a su proyecto de ley que permitiría el aborto en tres causales. Un primer triunfo a la espera de que en algunos meses más el Senado ratifique o no el respaldo al proyecto, que busca ser ley.
En días posteriores se han visto diversas expresiones de apoyo y rechazo a lo sucedido en el Parlamento; provenientes de organizaciones, políticos, representantes de Iglesia, ciudadanos que se han manifestado en la vía pública y líderes de opinión, tanto en Chile como en el extranjero.
El día 18 de marzo, desde el portal del movimiento Save The One (y su versión en español Salvar el 1) su presidenta, Rebecca Kiessling, una abogado norteamericana sobreviviente del aborto, quien fue concebida en una violación, emplazó con dureza a la presidenta chilena Bachelet, defendiendo a las potenciales víctimas que en Chile podrían ser abortadas al amparo del referido proyecto de ley.
Extracto del texto de Kiessling a la presidenta Bachelet (completo en inglés)
…En Chile el aborto fue abolido en 1989, pero ahora, con una Presidente agresivamente pro-aborto, Michelle Bachelet, Chile se enfrenta a lo impensable: una cultura de la muerteque se alimenta de los niños inocentes en el vientre materno.
Como alguien que fue concebida en una violación, tomo este ataque a mi grupo de forma muy personal. Algunos pueden decir: «No es nada contra ti, personalmente» o «No se trata de Ti Rebecca». Bueno, fácil para ti decirlo porque esto Sí me afecta personalmente: junto con los cientos de personas de mi organización global, Save The 1 (Salvar El 1 en español), que también fueron concebidos por violación y los cientos de madres embarazadas por violación…
Nací sólo 4 años antes de que el aborto fuera legalizado por el Tribunal Supremo de los Estados Unidos… Mi madre biológica de hecho fue a dos aborteros ilegales y yo casi fui abortada, pero ella desistió porque era ilegal, y porque tuvo miedo por su propia seguridad. Cuando nos conocimos yo tenía 19 años y me contó cómo fue secuestrada a punta de cuchillo por un violador en serie; y a pesar de que ella estaba muy feliz de conocerme, me dijo que ella me habría abortado si hubiera sido legal. ¡Yo, literalmente, le debo mi nacimiento a la ley que estuvo ahí para protegerme!
Siento que mi vida fue rescatada de un edificio en llamas, y como tengo la oportunidad de volver y salvar a otros, ¡voy a hacerlo! Lo más egoísta que podría hacer sería sentarme y decir, «Oh, bueno, al menos mi vida fue salvada». ¿Y otros no? No puedo hacer eso, ¿Puedes tú? Estoy viva gracias a que otros estuvieron dispuestos a protegerme porque reconocieron que cada vida importa y que valía la pena salvar la mía.
(Yo) No merecía la pena de muerte por los delitos de mi padre biológico. Es absolutamente bárbaro castigar a un niño inocente por el crimen de otra persona. ¿Qué tipo de sistema de justicia hace eso? Y, además, hay tan poca justicia para las víctimas de violación. Cada vez que un niño concebido en una violación es abortado, encubres el crimen, destruyes la evidencia y permites que violadores, pederastas y traficantes de sexo continúen explotando mujeres.
Presidenta Bachelet, yo le digo a usted: ¡Castigue a los violadores, no a los bebés! Por toda su retórica de que supuestamente le importan las víctimas de violación, ¿dónde (está) su postura sobre el castigo al violador? ¿Merece la pena de muerte? Usted dice que se preocupa por las mujeres, bueno, ¡yo soy una mujer! Ahora dígame, ¡¿De qué sirven mis derechos como mujer, si no tengo mi derecho a la vida?! No puede responder esta pregunta, porque todos los demás derechos carecen de valor si no se tiene derecho a la vida.
Co-fundé Esperanza Después de la Concepción por Violación, usando mi experiencia como abogado de familia para crear un modelo de legislación y para declarar ante los órganos legislativos buscando aprobar leyes para proteger a madres sobrevivientes de violación evitando que el violador obtenga derechos parentales. Estamos sacando nuestro modelo legislativo - La Ley de Protección del Niño Sobreviviente de Violación - aprobada por todos los Estados Unidos, e incluso en el Congreso, usando «pruebas claras y convincentes», para poner fin a los derechos parentales de los violadores. Sugiero que cualquier persona a la que realmente le importen las víctimas de violación embarazadas: centre sus esfuerzos en algo positivo para ellas y sus hijos en vez de tratar de castigar al niño inocente, dejando a la víctima de la violación vulnerable al violador.
Las mujeres que abortan después de una violación mayoritariamente expresan que el aborto es mucho más difícil de superar de lo que es la violación. El aborto es sólo más violencia en su vientre después de que ya ha sido traumatizado. Después del aborto, ella tiene que lidiar sólo con lo que se hizo con ella, ahora tiene que sufrir con lo que ella sabe que le hizo a su propio hijo.
Los estudios aquí en los Estados Unidos han demostrado que una víctima de violación tiene cuatro veces más probabilidades de morir durante el año siguiente después de haber sido violada. Tienen una tasa de homicidios más alta debido a que el aborto a menudo ayuda a perpetuar una relación abusiva. También tienen una mayor tasa de suicidio, sobredosis de drogas, depresión, violencia doméstica y así sucesivamente. El Dr. David Reardon del Instituto Elliott escribió un libro llamado Víctimas y Vencedores que cita gran parte de esta investigación. Así que si realmente te importa una víctima de violación embarazada, debes querer protegerla del violador, y del aborto - ¡y No del bebé! El bebé no es el enemigo terrible, y me molesta que lo muestren como tal. Un bebé no es lo peor que le puede pasar a una víctima de violación… un aborto lo es.
Sólo ten en cuenta que en cada vez que apuntas a un grupo de personas para su destrucción como la Presidente Bachelet lo está haciendo en Chile, estás enviando un mensaje a cada niño nacido - y a todas las madres criando a ese hijo - que su niño vale menos que todos los demás en su sociedad… La presidenta Michelle Bachelet ha puesto en la mira – el blanco - la vida de cada niño inocente concebido en una violación o que tiene un diagnóstico de «anomalía fetal grave», muchos de los cuales, de hecho, terminan por no ser fatal. ¡Presidente Bachelet, no lo haga, baje sus armas y deje de atacar a mi gente! No inicie una temporada de caza abierta de las personas como yo. Mi vida importa exactamente lo mismo que la suya.
Hoy en día, mi madre biológica y yo estamos agradecidas de haber sido salvadas del horror del aborto. Ella dice que soy una bendición para ella. Yo la honro y traigo su sanación. Para mi cumpleaños hace dos años y medio, mi madre biológica me llamó para desearme feliz cumpleaños y para decirme que mi abuela murió. Nací en el aniversario de mi abuela, y ella murió en mi cumpleaños. Mi madre biológica y yo tuvimos una larga conversación de corazón a corazón. Al final de nuestra llamada telefónica, estábamos a punto de colgar y ella me detuvo y entre lágrimas me dijo: «¡Rebecca, Rebecca! Sólo quiero decirte que estoy muy feliz de haberte tenido». ¡Ese fue el mejor regalo de cumpleaños de mi vida! No destruyan la esperanza y la belleza que tiene un niño y lo que el futuro le depara.
Rebecca Kiessling, abogada, presidenta de Save The 1
www.savethe1.com
www.salvarel1.com
www.rebeccakiessling.com
www.hopeafterrapeexception.org
www.embryodefense.org