(Zenit) La audiencia ha comenzado a las 10.34 y ha concluido a las 11.44 y ha contado con la presencia de los cinco acusados. Los periodistas tienen abogado de confianza, y los otros tres acusados abogado de oficio.
Al inicio de la sesión, Emiliano Fittipaldi ha pedido la palabra y ha realizado una declaración en la que ha explicado que ha decidido comparecer por respeto al Tribunal que le ha citado. Pero ha manifestado su «incredulidad por encontrarse imputado frente a una Autoridad Judicial distinta a la de mi país, aún habiendo escrito y publicado en Italia el libro por el que se me pretende incriminar». Al respecto ha recordado que en su país «la conducta de la que se le acusa no sería penalmente imputable, al no haber sido acusado de haber publicado noticias falsas o difamatorias, sino simplemente publicar noticias: actividad protegida y garantizada por la Constitución Italiana, la Convención Europea de los Derechos del Hombre y de la Declaración Universal de los Derechos del Hombre».
Tras la lectura de los cargos imputados por parte del Canciller, el Presidente ha comunicado haber transmitido al Presidente de la Corte de Apelación la petición del nombramiento de dos abogados de confianza por parte de Nuzzi y de monseñor Vallejo, para la eventual autorización.
Después se han escuchado dos excepciones preliminares. La primera de parte del abogado Bellardini –que defiende a monseñor Vallejo– por los tiempos para la presentación de las pruebas de la defensa. Asimismo lo ha hecho el abogado Musso, tras la declaración de su defendido, sobre la nulidad de la citación a juicio del mismo Fittipaldi por la falta de precisión sobre los hechos. El fiscal, Zannoti, ha respondido a la segunda excepción, argumentando que no se pretende poner en duda la libertad de prensa, sino que el imputado está llamado a responder por la conducta de la actividad realizada para obtener las noticias y los documentos publicados.
La formación de la corte, después de una reunión en la sala de juntas que duró cerca de tres cuartos de hora, ha rechazado las dos excepciones presentadas y ha fijado el calendario.
El lunes 30 de noviembre, se retoman las audiencias del juicio que se celebrarán cada día, por la mañana, y la tarde si fuera necesario, para escuchar a los acusados. Comenzará monseñor Lucio Vallejo Balda y le seguirán Francesca Chaouqui, Nicola Maio, y finalmente Fittipaldi y Nuzzi.
Los acusados han podido conversar algunos instantes con los periodistas presentes en la sala. Nuzzi les ha indicado que «no somos mártires, somos periodistas y cronistas». Por su parte, monseñor Vallejo ha asegurado encontrarse bien: «¿veis que estoy bien? Muy bien, estoy sereno, me tratan muy bien y aquí estoy protegido».
El Código Penal del Vaticano, en su artículo 116 bis, considera delito la divulgación de noticias reservadas. De resultar condenados los imputados, las penas pueden oscilar entre los cuatro y los ocho años de reclusión.