(La información) «La ley incluye además provisiones para castigar a cualquiera que tilde de infiel a cualquier grupo religioso o individuo», ha agregado. La cláusula tiene como objetivo hacer frente a la práctica del ‘takfir’, en la que una persona señala a otra como infiel por no seguir su corriente de pensamiento religioso.
La citada agencia ha señalado que «la ley tiene como objetivo crear unas bases sólidas para la tolerancia y la aceptación en EAU y pretende salvaguardar a la gente independientemente de su origen, creencia o raza».
Por otra parte, la ley prohíbe cualquier acto considerado como un insulto a Dios, sus profetas y apóstoles, y los libros sagrados y centros de culto, así como cementerios. Asimismo, criminaliza cualquier acto que equivalga a vandalismo de los rituales y lugares y símbolos sagrados.
La mayoría de los ciudadanos emiratíes son suníes, si bien el país acoge a cientos de miles de expatriados no musulmanes y es un lugar popular entre los turistas extranjeros.
Diversas organizaciones pro Derechos Humanos han criticado a las autoridades por restringir la libertad de expresión y utilizar las leyes antiterroristas para encarcelar a los opositores.