(RV) El Papa citó la exhortación Evangelii Gaudium: «Mientras en el mundo, especialmente en algunos países, reaparecen diversas formas de guerras y enfrentamientos, los cristianos insistimos en nuestra propuesta de reconocer al otro, de sanar las heridas, de construir puentes, de estrechar lazos y de ayudarnos “mutuamente a llevar las cargas”».
El Santo Padre invitó a los fieles al desafío de dar a conocer la Palabra de Dios, no con términos «altisonantes, ni con complicados, sino haciendo que nazcan de la alegría del Evangelio. Y volvió a la importancia del término ‘unidad’ para “que el mundo crea”».
«La evangelización no consiste en hacer proselitismo, sino en atraer con nuestro testimonio a los alejados, en acercarse humildemente a aquellos que se sienten lejos de Dios y de la Iglesia, a los que son temerosos o a los indiferentes para decirles», aseguró.