(Efe) Sólo dos son italianos, aunque Italia sigue siendo el país más representado en el Colegio cardenalicio, y los nuevos cardenales proceden de países que hasta ahora no los tenían, como Etiopía, Vietnam, Nueva Zelanda, Birmania, Tonga o Cabo Verde, entre otros.
En la lista de nuevos cardenales están el arzobispo español de Valladolid, Ricardo Blázquez, además de Alberto Suárez Inda, arzobispo de Morelia (México); el también español José Luis Lacunza Maestrojuán, arzobispo de David (Panamá), y Daniel Fernando Sturla Berhouet, arzobispo de Montevideo (Uruguay).
El único miembro de la Curia romana que será hecho cardenal por el papa es el arzobispo francés de origen marroquí Dominique Mamberti, prefecto del Supremo Tribunal de la Signatura Apostólica y durante años «ministro de Exteriores» del Vaticano.
Con estos nombramientos, el colegio cardenalicio quedará formado por 227 miembros, de los cuales 125 serán electores al ser menores de 80 años, requisito para participar en el Cónclave que eligen a un nuevo pontífice.
La ceremonia de creación de los «príncipes de la Iglesia» se celebrará en el interior de la basílica de San Pedro y como requiere el ritual los nuevos purpurados recibirán de manos del papa un anillo, símbolo de su nuevo compromiso universal con la Iglesia, y el capelo cardenalicio, rojo como la sangre de los mártires que dieron su vida por defender su fe.
Tras la entrega a cada cardenal de la «Bula de Creación de Cardenales», la asignación de diaconías y el intercambio del beso de la paz entre los nuevos miembros del Colegio Cardenalicio y el papa, ellos y los fieles rezarán juntos el padrenuestro.
Por la tarde será el momento de los saludos, y los 20 cardenales recibirán las felicitaciones en varios lugares de la Ciudad del Vaticano.
Al día siguiente, el papa Francisco presidirá la concelebración de la una misa en el interior de la basílica de San Pedro, y los días posteriores cada uno de ellos celebrará la Eucaristía en las iglesias romanas que les han sido asignadas.