(Agencias/InfoCatólica) El juez les ha levantado la medida de incomunicación entre ellos que les impuso en el momento de su detención, el lunes pasado.
A los tres sacerdotes y al laico, el juez instructor les ha impuesto medidas de alejamiento y prohibición de comunicación respecto a las dos personas que han denunciado haber sufrido abusos sexuales. Asimismo, como medida cautelar, los cuatro tendrán que comparecer en sede judicial cada 15 días. Las medidas impuestas por el juez coinciden con lo solicitado por la Fiscalía.
Los autos emitidos destacan las dificultades procesales encontradas en relación a la tardanza con que se han interpuesto las denuncias.
Tras conocer la situación procesal en la que han quedado, los detenidos, en apariencia cansados, según fuentes de su entorno, se han mostrado «felices» y se han fundido en un abrazo, según los letrados de oficio que les han asistido en la declaración, dado que su representante legal no ha podido hacerlo por la medida de incomunicación impuesta por el juez y ahora ya levantada. A este abogado se le dará mañana traspaso de las actuaciones, según las fuentes.
Los acusados han declarado ante el juez instructor tras haber permanecido dos días incomunicados en la Jefatura Superior de Policía de Andalucía Oriental, desde donde esta mañana han sido trasladados de uno a uno al Juzgado.
La Fiscalía se queja de la labor de los medios de comunicación
El fiscal encargado del caso, Francisco Hernández, ha criticado en declaraciones a los medios que hayan trascendido estos días detalles de la causa y se hayan publicado porque la investigación «se ha podido ver comprometida». «El secreto está adoptado simplemente para la protección de las víctimas», ha mantenido el fiscal, que por ello ha instado a los medios a su «colaboración» y ha apelado a su «sentido de la responsabilidad profesional».