(ABC/InfoCatólica) Ante esta situación, el capellán recuerda que mañana lunes hay convocada una misa. «Pienso que, con pleno derecho, debemos agotar todas las posibilidades para evitar que esto se produzca. De momento tendremos una misa el lunes, a la una de la tarde, en la capilla, para pedir juntos por esta intención especial», añade.
La polémica del cierre de capillas en la Complutense no es nueva. Los temores aparecen y desaparecen cada cierto tiempo. Hasta ahora, se mantenía abierto el diálogo entre el Arzobispado y la Universidad a fin de trasladar la capilla de Geografía e Historia a otro lugar «digno» dentro de la misma facultad. Parece que esa alternativa no se ha producido. Fuentes del Arzobispado han señalado a ABC que «no estamos cerrados al diálogo. Lo que nos han ofrecido no es un lugar adecuado, pero la capilla que existe se va a cerrar. Eso es así».
En enero de 2013 ya se mantenían los encuentros para buscar otro emplazamiento al oratorio de Geografía e Historia en el mismo edificio. El rector, José Carrillo, se enfrentaba, en aquellas fechas, a las críticas por su empeño querer proceder a un cierre masivo de los templos en los campus Complutenses. Lo negó rotundamente:«No he mandado cerrar capillas».
El decano de Geografía e Historia, Luis Otero, ha sido uno de los protagonistas clave en las negociaciones con el Arzobispado de Madrid para el «cambio de ubicación» de la capilla. La actual está situada en la planta baja del edificio y es un lugar amplio y luminoso. El espacio que hace año y medio ofrecía la facultad al Arzobispado es un habitáculo de reducidas dimensiones en una planta superior que, hasta hace poco, se utilizaba para guardar ordenadores fuera de uso.
Otero esgrimía razones de índole académico para el cambio de ubicación de la capilla de su facultad. «Está en la planta baja. Con los planes de estudio de Bolonia hay más grupos. Nos faltan aulas. Donde hoy está la capilla podría meter a cien estudiantes. Por eso he propuesto su traslado a la primera planta, a un aula más pequeña». Ese habitáculo es, precisamente, el que no convence a las autoridades eclesiásticas de Madrid.
«Acuerdo de Asistencia»
Los oratorios están en la Universidad Complutense porque así lo establece el «Acuerdo sobre Asistencia Religiosa Católica» firmado el 20 de diciembre de 1993, por el entonces arzobispo Ángel Suquía y el rector Gustavo Villapalos. Hay siete: ésta de Geografía e Historia más las de Derecho, Químicas, Educación, Ciencias de la Información y Filosofía, en el campus de Moncloa. Se suma la de la facultad de Psicología, que se encuentra en el campus de Somosaguas.
El decano de Geografía e Historia siempre se ha mostrado cauto con el asunto de la capilla. Hace año y medio, inmerso en duras negociaciones con la Iglesia para cambiar de ubicación el oratorio, el representante académico insistía a este periódico: «El acuerdo Arzobispado-Complutense habla de a «una» capilla, no de «la» capilla. El traslado no vulnera el acuerdo (...) Le aseguro que yo no voy a hacer nada por las bravas», aseguraba el decano Otero. «¿Y lo del martes, qué?», se preguntan ahora los alumnos.