(AICA/InfoCatólica) Según informaciones de la agencia Fides y de Radio Vaticana, el ejército sirio leal al presidente Assad retomó el control de la ciudad de Maalula, a 50 kilómetros de Damasco, y sigue ganando terreno en toda la disputada región de Qalamun. La ciudad de Maalula, donde se encuentra el monasterio de Santa Tecla y el santuario dedicado a los Santos Sergio y Baco, estaba en manos de las milicias rebeldes desde hace unos cuatro meses.
Entre las formaciones que habían atacado la ciudad también estaban los milicianos yihadistas de Jabhat al-Nusra. El 3 de diciembre del año pasado 13 religiosas greco-ortodoxas del monasterio de Santa Tecla fueron secuestradas junto con tres de sus colaboradores. La retención terminó felizmente el domingo, 9 de marzo, cuando las monjas y los tres colaboradores fueron liberados en el Líbano.
Tras la reconquista de la localidad cristiana de Maalula, el ejército sirio comprobó que la devastación sufrida por los lugares de culto cristiano durante los cuatro meses en los que la ciudad estuvo ocupada por las milicias rebeldes, y que había sido denunciada por el gobierno sirio, eran tristemente ciertas.
En particular sufrieron daños graves el santuario greco-melquita de Mar Sarkis, donde la iglesia está devastada, el suelo ha desaparecido, los objetos religiosos y las imágenes y libros sagrados están rotos, los iconos de la sacristía han desaparecido y también las campanas y la cruz que estaba sobre la cúpula del convento greco-melquita. El santuario, fundado a finales del siglo V, está dedicado a los santos Sergio y Bacco, militares romanos martirizados por su fe bajo el Emperador Galerio. (250-311 d.C.).
Antes de ser arrasado por la guerra, en el pueblo de Maalula -que ahora está deshabitado- vivían 5.000 sirios, la gran mayoría cristianos (greco-católicos y greco-ortodoxos).
La reconquista de Sarkha, Maalula y Jibbeh es el resultado de la ofensiva con la que el ejército sirio tomó el control casi íntegro de toda la región del Qalamun, donde también pasa la vía estratégica mediante la cual los rebeldes hacían llegar armas a sus fortalezas en los alrededores de Damasco.
En esta ofensiva las unidades militares sirias fueron apoyadas por las milicias chiítas libanesas. Precisamente tres operadores de la cadena de televisión de Hezbolá Al-Manar TV fueron asesinados por francotiradores mientras estaban documentando la reconquista de Maalula.