(Agencias) El Papa ha reclamado que «se respeten los derechos humanos», que «se cuide a la población necesitada de asistencia humanitaria» y que «se alcance la deseada paz a través del diálogo y la reconciliación».
Por ello, ha invitado a todos los fieles a unirse a su oración por la paz en Siria y en la región y ha rezado con todos los presentes un Ave María.
Asesinato del jesuita
«Su brutal asesinato me ha llenado de profundo dolor y me ha hecho pensar también en tanta gente que sufre y muere en aquel país atormentado, mi amada Siria, ya es demasiado larga la agonía de un sangriento conflicto que continúa causando muerte y destrucción», ha remarcado el Pontífice. También ha recordado a las numerosas personas secuestradas, cristianos y musulmanes, sirios y de otros países, entre los cuales se encuentran asimismo obispos y sacerdotes. «Pedimos al Señor que puedan volver pronto con sus seres queridos y familiares», ha añadido.