(Francisco Miguel Gutiérrez/InfoCatólica) Mons. Martínez acompañó a los fieles ucranianos en la Misa y les dirigió unas palabras de apoyo y de comunión:
«Hemos comulgado del mismo cuerpo y sangre de Cristo, y eso significa que aunque entendamos mal nuestras lenguas o vengamos de países diferentes, somos miembros del mismo cuerpo, el único cuerpo de Cristo que tiene tanta riqueza por todo el mundo, luego estamos unidos, somos una misma cosa. Yo quiero bendeciros a vosotros, a vuestras familias y a vuestro país».