(AP/PD) A pesar de que las relaciones entre los líderes religiosos y las autoridades es considerada buena, y la policía está haciendo un esfuerzo por proteger estos lugares, los ataques de este tipo han aumentado en los últimos años, unido a un aumento en la radicalización del discurso de algunas ramas del judaísmo ultraortodoxo.
Hosam Naoum, cuidador del cementerio protestante, lamentaba el ataque. «Ningún ser humano estaría de acuerdo con esto», expresó, pidiendo a las autoridades que aumenten los esfuerzos para garantizar la seguridad.
Detenidos y puestos en libertad
La policía arrestó inicialmente a cuatro jóvenes israelíes de Cisjordania, supuestamente relacionados con el ataque. Los cuatro, sin embargo, fueron puestos en libertad sin cargos, a la espera de un nuevo interrogatorio.
Dos de los sospechosos tenían ya antecedentes de acciones similares. Al parecer estaban relacionados con «Jóvenes de la colina», un movimiento de extremistas judíos jóvenes implicados en una serie de ataques en los últimos años a mezquitas, lugares cristianos y propiedades del ejército israelí.
Los cuatro sospechosos alegaron que habían entrado en el cementerio para «realizar un baño ritual», según la prensa local. Los medios también identificaron a dos de los sospechosos como estudiantes en un seminario judío cercano, conocido por sus puntos de vista ultranacionalistas.
Naoum dijo que informará de los hechos a las embajadas alemanas y británicas, que tienen representantes en el consejo de administración cementerio, así como al arzobispo de Canterbury.
El ataque se suma a una lista de sitios cristianos de alto perfil que han sido objeto de vandalismo en el último año. Entre estos se incluye un monasterio trapense en Latrun, fuera de Jerusalén -donde los vándalos quemaron una puerta y pintaron con aerosol «Jesús es un mono»- y otros edificios centenarios, entre ellos una iglesia Bautista en Jerusalén, así como otros monasterios. Algunos religiosos denuncian que han sido escupidos por estudiantes religiosos ultraortodoxos mientras caminaban por la Ciudad Vieja de Jerusalén, cuando llevaban cruces en lugares visibles o sotanas.
Solo del dos por ciento de la población es cristiana
Sumados católicos, protestantes y ortodoxos, los cristianos de Israel representan un 2 por ciento de un población de ocho millones. Alrededor de tres cuartas partes de ellos son árabes, y muchos llegaron durante una ola de inmigración procedente de países de la ex Unión Soviética. Decenas de miles de trabajadores extranjeros en Israel son también cristianos.
En los últimos tres años se han registrado 17 ataques a lugares cristianos en Tierra Santa, según el informe de Search for Common Ground, una ONG que supervisa los informes en prensa de los ataques a lugares religiosos.
Apenas denuncian
El investigador Kevin Merkelz, miembro del grupo, considera que los ataques son muchos más, pero que no todos llegan a trascender a la prensa.
«Los cristianos que están aquí todavía prefieren mantener un perfil bajo cuando son atacados», dijo Merkelz.
A menudo, los líderes tienen miedo de quejarse a la policía, debido a que muchos residen en Israel con visas especiales y desean mantener buenas relaciones con las autoridades, explicó Hana Bendcowsky, del Centro de Jerusalén para las Relaciones Judeo-Cristianas. «Hay un sentir de que la policía no está haciendo lo suficiente», dijo.
Rosenfeld , portavoz de la policía, aseguró que la autoridad israelí se está esforzando. Ha creado recientemente un grupo de trabajo para combatir los delitos motivados por «nacionalismo», y la semana pasada arrestaron a 14 jóvenes en relación con ataques a árabes.
Además la policía está llevando a cabo más patrullas en torno a los lugares «sagrados» y están considerando la instalación de cámaras de seguridad para protegerlos. También afirmó que el número de ataques contra sitios cristianos sigue siendo relativamente bajo.
El sacerdote Pierbattista Pizzaballa, Custodio de Tierra Santa para la Iglesia Católica, considera que tales ataques «se han convertido en rutinarios». Los que atacan son «extremistas que van en contra del espíritu de tolerancia. También es cierto que son condenados con firmeza por la comunidad mayoritaria judía».
Naoum, cuidador del cementerio, contó que un grupo de 150 figuras relevantes de la religión judía realizaron una visita de solidaridad al cementerio esta semana.