(El Periodic/InfoCatólica) Transcurrido el periodo de estudio del presunto milagro en la fase diocesana, el arzobispo de Valencia, Mons. Carlos Osoro clausurará hoy esta fase para que el tribunal creado 'ex professo´ en Valencia y formado por sacerdotes, médicos y peritos en diversas materias remita ahora la documentación a la Santa Sede para que continúe allí el proceso».
Una vez llegue a Roma el caso será valorado por un congreso de médicos de la Congregación para las Causas de los Santos, posteriormente por una comisión de teólogos y, finalmente, por la de obispos y cardenales que remitirían y presentarían la documentación al Papa quien promulgaría el «decreto de milagro».
El milagro
La «posible gracia» obrada por intercesión del siervo de Dios Vicente Garrido Pastor corresponde a una curación «inexplicable» de una madre de familia, de Albacete, a quien le fue diagnosticado en el año 2003 un «adenocarcinoma de endometrio estadio IVB, por afectación metastásica en cadera derecha» con una esperanza de vida de diez meses.
Transcurridos diez años desde entonces, «y después de numerosos controles y valoraciones médicas por parte de especialistas oncólogos de varios hospitales», en el año 2011, los últimos informes y pruebas realizadas constataron la «remisión completa» del tumor y la «ausencia actual» de la enfermedad.
La mujer en la que se obró el «probable milagro», durante su larga enfermedad, «se encomendaba y sigue encomendándose al siervo de Dios Vicente Garrido a quien le guarda enorme devoción», han asegurado las mismas fuentes.
«Al tratarse de una 'causa de virtudes´, para llegar a la beatificación se requiere la aprobación de un milagro», han explicado las mismas fuentes, que han añadido que «si la causa llegara a su fin vendría de inmediato la beatificación».
Biografía del P. Vicente Garrido Pastor
Vicente Garrido Pastor nació en Benaguacil, el 12 de noviembre de 1896. Estudió en el Seminario Conciliar y fue becario del Real Colegio de Corpus Christi de Valencia. Recibió la ordenación sacerdotal el 12 de junio de 1921 y fue coadjuntor de Benimasot y Albaida. Destacó su actividad apostólica con la juventud femenina.
El 13 de febrero de 1934, reunió en Burjassot a un grupo de mujeres para dirigirles un retiro espiritual. Cuatro meses después, consiguió la aprobación de los estatutos de una sociedad civil, denominada Sociedad Amor Cristiano, que vendría a ser el germen del actual Instituto.
Desde entonces, han trabajado en la promoción, formación e evangelización de las mujeres, y en numerosos pueblos y ciudades crearon talleres para su formación y promoción laboral. Ahora, han adaptado su servicio a las necesidades del momento presente y en la archidiócesis de Valencia dirigen tres centros para mujeres en riesgo de exclusión social, e inmigrantes, transeúntes y con problemas familiares, en Sagunto, Museros y en Valencia.
Además, las Obreras de la Cruz han impulsado otros proyectos solidarios en Chile y Bolivia, y están presentes también en Rwanda. Igualmente, el Instituto asume otras acciones, como el impulso de los ejercicios espirituales, la colaboración parroquial y el apostolado social obrero.