(EP) La niña, identificada como Rawan, falleció por una perforación uterina durante el acto sexual con su marido, un hombre de cuarenta años, en la ciudad de Meedi, provincia de Hajjah (noroeste de Yemen), según informaron en primer momento y confirmaron después residentes del lugar.
En respuesta, las autoridades han atendido peticiones como la formulada por la Unión Europea para abordar el caso. «Estamos tratando seriamente esta cuestión, será investigada y sus responsables serán llevados ante la justicia», aseguró Rajeh Badi, ayudante del primer ministro, Mohammed Salem Basindwa.
La Unión Europea pide que se cambie la ley
Este viernes, la máxima responsable de política exterior de la UE, Catherine Ashton, pidió a las autoridades de Saná que «investiguen sin dilación el delito y juzguen a sus responsables», y opinó que el país debería restituir inmediatamente la ley que estipulaba una edad mínima para contraer matrimonio.
La medida es complicada de imponer. Yemen es uno de los países más pobres del mundo y muchas familias sin medios entregan a sus hijas en matrimonio para ahorrarse los gastos en educación y mantenimiento, y ganar algo de dinero con la dote recibida a cambio.