(Efe) También han confirmado sus asistencia la presidenta brasileña, Dilma Rousseff, y el jefe de Estado de Chile, Sebastián Piñera.
Por parte de México acudirá su presidente, Enrique Peña Nieto, y por Paraguay, Costa Rica y Honduras estarán sus jefes de Estado, Federico Franco, Laura Chinchilla y Porfirio Lobo, respectivamente, mientras que la delegación de Guatemala la encabezará su canciller, Fernando Carrera.
También asistirá a la misa, que comenzará a las 09.30 del próximo martes, el vicepresidente de EEUU, Joe Biden, «feliz de tener la oportunidad de transmitir personalmente» sus buenos deseos y los del pueblo estadounidense al papa Francisco en esa ocasión.
La ceremonia contará también con la asistencia del gobernador general de Canadá, David Johnston, que ejerce como jefe de Estado del país en representación de la reina de Inglaterra Isabel II, quien es oficialmente monarca de Canadá.
El continente europeo estará asimismo ampliamente representado en la misa de inicio del pontificado, que tendrá lugar el día festividad de san José, patrón de la Iglesia.
De España acudirán al acto el príncipe Felipe de Borbón, heredero de la Corona española, y su esposa, la princesa Letizia, y el presidente del Gobierno, Mariano Rajoy.
También estará presente la canciller alemana, Angela Merkel, mientras que en representación de Francia acudirán el primer ministro, Jean-Marc Ayrault, y el titular de la cartera de Interior, Manuel Valls.
El presidente de Irlanda, Michael D. Higgins, encabezará la representación de su país, en tanto que el Reino Unido todavía no ha decidido quién asistirá a la ceremonia, que tendrá lugar sólo dos días antes de la entronización también del nuevo arzobispo de Canterbury, Justin Welby.
La Unión Europea (UE) estará representada por los presidentes del Consejo Europeo y de la Comisión Europea, Herman Van Rompuy y José Manuel Durao Barroso, respectivamente.
Francisco rezará el ángelus el próximo domingo, el primero de su pontificado, desde la ventana del apartamento pontificio que da a la plaza de San Pedro, que todavía no ocupa.