(Efe/InfoCatólica) Anteayer varias dudas pusieron en cuestión el proceso electivo, en particular el procedimiento por el cual no se puede nombrar un nuevo patriarca mientras otro siga vivo, como el es caso del cuarto, Abune Merkorios.
El cuarto patriarca se exilió en Estados Unidos después de que el actual régimen etíope derrocara la dictadura comunista de Mengistu Hailemariam e impusiera al patriarca Abune Paulos. Algunos sectores de la Iglesia querían la restauración de Abune Merkorios en el cargo, sin realizarse votación alguna.
Abune Mattias fue elegido entre cinco candidatos, que se repartieron los alrededor de 300 sufragios que no cosechó el elegido. Cinco de los más de 800 votos son de la Iglesia Ortodoxa de Egipto, matriz de la etíope, merced a un acuerdo por el que cada una de las iglesias tiene cinco votos en la elección de la otra.
El quinto patriarca, Abune Paulos, enfermó de manera repentina el 15 de agosto de 2012 y fue trasladado a un hospital en Adis Abeba, en el que falleció poco después. Era el quinto patriarca desde que, en 1959, Etiopía empezara a nombrar a sus propios líderes, acabando así con siglos de tradición durante los cuales los patriarcas eran egipcios nombrados por El Cairo.