(Aleteia/InfoCatólica) Estos temas fueron establecidos por expertos nacionales e internacionales en el marco del Coloquio “Laicidad y Libertad Religiosa”, organizado por la Universidad Panamericana y el Instituto de Investigaciones Jurídicas de la UNAM.
Durante la inauguración del Coloquio, José Antonio Lozano Díez, director de la Facultad de Derecho de la Universidad Panamericana señaló que “el país se encuentra en un momento para el que resulta indispensable un replanteamiento de las relaciones que se establecen entre Estado y sociedad en torno al ejercicio de la conciencia, de la experiencia general de las creencias, y de la vida con sentido religioso, mismas que desembocan también en el replanteamiento de las condiciones más propicias para el desarrollo de un espacio público que, de forma auténtica, sea incluyente”.
En la parte central del Coloquio, el catedrático de la Universidad de Roma Tor Vergata, Fabio Macioce, subrayó que un Estado laico, “debe ser abierto a todos sus ciudadanos”. Reconoció que el ser humano no se limita en su pertenencia a la comunidad política, sino que admite que puede integrarse en una variedad de supra-identidades.
De esta forma, continúo Fabio Macioce, “un Estado laico no se limita a ese reconocimiento de forma negativa: no sólo no disciplina o controla las áreas en las que no es competente, sino que se esfuerza porque la participación de los ciudadanos en estas comunidades sea posible y realmente libre”.
Al ofrecer la conferencia “El Principio de la Laicidad”, sostuvo que “la separación que reduce el vínculo religioso de un nivel sólo privado, es insuficiente tanto desde el punto de vista teórico, como en términos de la realidad social”.
Laicidad y libertad religiosa
Por su parte, Jorge Adame Goddard, del Instituto de Investigaciones Jurídicas de la Universidad Nacional Autónoma de México, subrayó que no es necesario plasmar explícitamente en la Constitución que el Estado es laico pues abre “un riesgo” de que se malinterprete y se convierta “ideológicamente en anti religioso” y citó como ejemplo Francia, que es tradicionalmente cristiano pero donde hay esta declaración explícita de laicidad y en donde la República se pone en condición antagonista con la religión.
Sin embargo, agregó Adame, en conferencia de prensa, en México existen los instrumentos para solucionarlo, pues “Estado laico, respetuoso de la libertad religiosa, es un estado democrático” y la reforma al art 40, que fue aprobada conjuntamente dice que la República mexicana se organiza como democrática, federal, laica y representativa.
“Tenemos la posibilidad de que la libertad religiosa, en el ámbito privado y en el público se respete en México y que el Estado esté organizado como un Estado laico que no reconoce una religión oficial pero que respeta la libertad religiosa del pueblo. El riesgo es Estado laico despótico, pero la posibilidad real que tenemos en México es Estado laico democrático y a eso debemos de aspirar”, dijo Adame Goddard.