(AnalisisDigital/ReL) “Gozo, gratitud y sentimientos de alegría nos embarga en estos momentos, no sólo al arzobispo de Madrid, a los obispos auxiliares y a todos los peregrinos que están presentes aquí, en Sidney, que han participado en la Eucaristía, y que han acogido aclamando el anuncio del Santo Padre, sino que participan de esta alegría todos los peregrinos de España”. Estas fueron las primeras impresiones del arzobispo de Madrid, cardenal Antonio Mª Rouco Varela, a Popular TV, desde Sydney, tras el anuncio por el Santo Padre de que Madrid será la sede de la Jornada Mundial de la Juventud del 2011
Para el Cardenal de Madrid, “la Jornada Mundial del año 2011 puede significar, para la Iglesia en Madrid, un momento donde sus dinamismos apostólicos y misioneros, sobre todo de acercamiento al Señor a la juventud, y de la juventud al Señor, puedan alcanzar una gran fecundidad, y lo pueda irradiar en todo el mundo y para todo el mundo". Añadió, asimismo, que "también va a ser un momento de excepcional valor para la Iglesia y para los jóvenes de España, porque nos va a poner en contacto con lo mejor de nuestra tradición, lo que podíamos llamar el sentido de la vida y de los grandes ideales que nos han movido a todos a lo largo de muchos siglos”.
“Es una gran gracia de Dios, la que nos ha concedido a través de la decisión del Papa, afirmó el Arzobispo de Madrid, y nosotros la acogemos con gratitud y respeto. Primero, con respeto al Santo Padre, que ha elegido Madrid por España y, naturalmente, por Europa. Y también nos mueve la gratitud al Señor, sin el cual nada se hubiera hecho”.
El purpurado aseguró que prevé que acudan a esta cita «mínimo un millón de personas, posiblemente dos». Para el arzobispo de Madrid se trata, además, de un reconocimiento a su carrera, puesto que ese mismo año, 2011, presentará su renuncia, al cumplir 75 años. El cardenal Rouco se refirió ayer al aeródromo de Cuatro Vientos como posible escenario de la celebración de la JMJ de Madrid y que ya fue utilizado en la vigilia de mayo de 2003 durante la visita de Juan Pablo II. «Del Gobierno esperamos, por un lado, libertad de acción, y segundo, una cooperación leal como nosotros haremos igualmente», afirmó en rueda de prensa tras conocerse la designación de la capital española como sede del encuentro religioso. Monseñor Rouco, que mañana regresa a España, ha indicado que espera reunirse con el presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, próximamente y que «es posible» que la entrevista se celebre antes del fin de julio.
