(Efe/InfoCatólica) El alcalde de Buenos Aires, Mauricio Macri, decidió vetar la ley al considerar que «excede lo establecido por la Corte Suprema de Justicia de la Nación», informó el Gobierno porteño a través de un comunicado.
La ley pretende regular los supuestos del aborto no punibles establecidos en el Código Penal argentino según las interpretaciones más favorables al aborto libre, so pretexto de atender a la sentencia dictada por la Corte Suprema de Justicia el pasado marzo y a la presión del lobby abortista internacional.
El comunicado difundido ayer señala que tras el veto de la ley, la práctica del aborto se efectuará de acuerdo al procedimiento aprobado por el Ministerio de Sanidad del Gobierno de Buenos Aires. Este exige una declaración jurada o una denuncia policial en los casos de violación y obliga a las adolescentes menores de edad y a las discapacitadas a informar a sus padres.
La legisladora oficialista María Elena Naddeo expresó su «total repudio y disconformidad con la decisión del jefe de Gobierno» y aseguró que el veto es «un retroceso». El Código Penal argentino incluye en su artículo 86 dos supuestos despenalizados de aborto: en caso de peligro para la vida o la salud de la madre y en caso de violación o abuso de una mujer discapacitada, aunque el artículo suscita diferentes interpretaciones entre jueces y médicos.
