(Efe) El Gobierno de Nigeria anunció la medida anoche tras el ataque de una decena de hombres armados en la noche del pasado lunes sobre una iglesia evangélica pentecostal de Okode.
Los asaltantes apagaron el generador que proveía de corriente eléctrica al templo mientras los fieles atendían a la sesión de estudio bíblico semanal, lo que dejó la iglesia a oscuras, y bloquearon todas las salidas. Seguidamente, comenzaron a disparar indiscriminadamente a los fieles durante al menos 20 minutos.
Por otra parte, dos soldados murieron ayer también en Okode al ser atacados por hombres armados, según informó Simon Ile, portavoz de la Policía Estatal de Kogi, donde se encuentra la ciudad.
Aunque ningún grupo se ha hecho responsable de los ataques, la secta radical islámica Boko Haram ha estado llevando a cabo este tipo de matanzas de cristianos de forma habitual en los últimos meses.