(Agencias/InfoCatólica) El documento ha sido enviado tras el Capítulo General celebrado por los lefebvrianos a principios de julio en Econe (Suiza), donde tienen su sede central.
Según el documento de Thouvenot, las tres condiciones que consideran irrenunciables para regularizar su situación en la Iglesia y que el Vaticano debe aceptar son:
–1.«Libertad de preservar, transmitir y enseñar la sana doctrina del Magisterio constante de la Iglesia y de la verdad inmutable de la Tradición divina; libertad de resistir, corregir, reprender, incluso públicamente, a los autores de errores o novedades del modernismo, del liberalismo, del Concilio Vaticano II y de sus consecuencias».
–2. Usar exclusivamente la liturgia de 1962. Mantener la práctica sacramental que tenemos actualmente (incluyendo órdenes, confirmación, matrimonio).
–3. Garantía de tener al menos un obispo lefebvriano.
En la carta se citan otras tres condiciones, pero que no serían vinculantes: la posibilidad de tener tribunales eclesiásticos propios de primer grado; la exención de las casas de la Fraternidad respecto a la jurisdicción de los obispos diocesanos, una comisión pontificia para la Tradición que dependa del Papa y en la que la mayor parte de los miembros, además del presidente, estén de acuerdo con la Tradición.