(Efe) «Nuestro país lleva quince años con esa tradición (la de ordenar prelados sin permiso papal), por lo que el acto está por encima de cualquier reproche», añadió el portavoz de la Cancillería china.
A su vez, enfatizó que China «está dispuesta a mejorar las relaciones con el Vaticano», para lo que recomendó a la Santa Sede que sea «pragmática» en sus acciones.
El Vaticano informó ayer de que el sacerdote chino José Yue Fusheng, ordenado el pasado día 6 obispo de Harbin sin el mandato pontificio, quedaba automáticamente excomulgado, a la vez que abogó por que las autoridades chinas «no promuevan gestos contrarios a la Santa Sede».
Ésta no es la primera vez que queda excomulgado un obispo chino ordenado sin la aprobación del papa. El anterior fue Lei Shiying, de la diócesis de Leshan (provincia occidental de Sichuan), hace algo más de un año.
En paralelo, el recién nombrado obispo auxiliar de la diócesis católica de Shanghái, Mons. Thaddeus Ma Daqin (que sí contaba con el visto bueno papal) fue apartado ayer de su cargo por las autoridades chinas después de hacer pública en una homilía su intención de abandonar la Iglesia Patriótica Católica de este país asiático.
La Iglesia Patriótica china está ligada al régimen comunista y no reconoce la autoridad del Vaticano.