(Zenit) Nos da la bienvenida con su típico modo de ser entusiasta y carismático. Es Kiko Argüello, fundador del Camino Neocatecumenal, quien nos recibe en un hotel a pocos pasos de San Pedro, en una atmósfera casi confidencial, que más parece una conversación que una entrevista. Con la alegría todavía en los ojos y en el corazón por el encuentro con el santo padre en el aula Pablo VI, Kiko concede otra breve entrevista a Zenit, para dar gracias a Dios por la maravillosa historia que está haciendo con este camino de iniciación cristiana y comentar el evento del viernes.
- Comencemos con una pregunta simple: ¿cómo fue el encuentro de esta mañana?
¡Fantástico! Ha sido realmente maravilloso el hecho de que hayan sido confirmadas las celebraciones que marcan todas las etapas de la gestación cristiana que el Camino ha construido. Esperábamos este momento y finalmente, la Iglesia ha confirmado el Camino Neocatecumenal como iniciación cristiana, en su doctrina, en las liturgias y en las etapas. Es importantísimo, sobre todo, el hecho de que el papa haya confirmado que las comunidades pueden celebrar las misas dominicales por comunidades. Es un hecho sociológico de gran importancia, que quiere decir que la pequeña comunidad es la salvación para la Nueva Evangelización. La Eucaristía, de hecho, crea y forma la comunidad cristiana, la hace sólida, la une.
- ¿Y en lo que respecta a la misión ad gentes?
La misión ad gentes es también una pequeña comunidad en medio de personas completamente paganas o alejadas de la Iglesia. Lo que vemos es que estas personas se sienten atraídas por las “pequeñas comunidades", representadas por las familias en misión, y se sorprenden del amor que muestran a los demás y entre sí. Se dejan catequizar en sus casas y se convierten después, ellos mismos en una pequeña comunidad.
- Todo esto, ¿qué riqueza adicional aporta a la Iglesia?
Podemos decir que estamos comenzando una nueva página en la historia: la nueva evangelización, en medio de una crisis histórica que afecta a toda la sociedad y que se llama secularización. A muchísima gente, no sabemos por qué, le molestan las iglesias; en algunos países, especialmente europeos, se ha llegado incluso a venderlas o cerrarlas. Por eso estoy contento y sorprendido cuando, justamente con estas misiones ad gentes, hay personas que dicen "gracias, porque de lo contrario nunca habría entrado en una iglesia" o dan gracias por "el amor y la acogida" que respiran en las casas de estos hermanos que les acogen. Son muchas, por cierto, las personas que acuden a la catequesis pero no quieren irse: son las once de la noche y todavía no vuelven a casa. Esto sucede también porque la gente en nuestra sociedad se siente muy sola...
- El Camino Neocatecumenal sigue dando frutos después de cuarenta años, basta pensar en el gran número de llamadas vocacionales. ¿Qué piensa de estos dones que el Señor hace al Camino y sobre todo a la Iglesia?
¿Qué pensar?... que el Señor es muy bueno con nosotros. Realmente doy gracias a Dios, porque a pesar de que hemos tenido y tenemos muchas dificultades y sufrimientos, nunca nos ha abandonado, sino que nos ha apoyado y sostenido siempre. El encuentro con el papa es una prueba de ello.
- ¿Hacia qué dirección se está moviendo ahora el Camino?
Hacia la puesta en marcha de una nueva evangelización en el mundo. Estamos mirando hacia nuevos horizontes, por ejemplo, últimamente la Iglesia Ortodoxa se ha mostrado también interesada en nuestro itinerario de fe. Pero sobre todo, creo que debemos prepararnos para China, Vietnam, en suma toda Asia, y tenemos bastantes familias listas para salir en misión hacia el Oriente del mundo.
- También se han creado cinco nuevos seminarios para preparar a los jóvenes que vayan a China…
Kiko Argüello: ¡Exactamente! Preguntamos a veinte mil jóvenes quiénes se sentían llamados a ser sacerdotes y evangelizar en China, y respondieron cinco mil. Ahora estos muchachos serán objeto de discernimiento, preparados, tendremos que ver quién completará los estudios, etcétera. ¡En suma, China, Asia!
- Por último, ¿hay algo que quiera decir a todos los que forman parte del Camino Neocatecumenal, y también a todos los cristianos?
Sí, quiero manifestar un simple deseo: que encuentren Cristo y encuentren, por consiguiente, la vida verdadera que lleva a la vida eterna. Espero que todos se puedan encontrar verdaderamente con Jesucristo, porque El te da su naturaleza y su vida inmortal y esto te cambia completamente la existencia, te ayuda y te prepara.