(EP) Fernández-Carnicero ha defendido que el derecho a la vida "trasciende al capricho" y al "ejercicio arbitrario de la libertad" y por ello, ha apostado por recuperar la responsabilidad "que lleva a poner límites a la conducta" frente a la "banalización de algo tan importante y sagrado como es la vida humana".
En cuanto a estos derechos, de los que, a su juicio, existe "inflación", ha precisado que "no suelen pasar de ser retórica anestesiante fruto de la exhibición ideológica que se agota en la propaganda política".
En esta línea, Fernández-Carnicero ha advertido de que la acumulación "no contribuye a un aumento de la seguridad o el bienestar de los ciudadanos" sino a que se "amontonen promesas fallidas" y ha apostado por que "cuantos menos derechos y leyes haya, mejor", siempre que sean con "más calidad y mayores garantías".
En cualquier caso, ha instado a la ciudadanía a "despertar" y a "organizarse" para dejar de ser una sociedad "que espera a que el partido político de turno garantice sus derechos". En este sentido, ha destacado la acción de asociaciones como el Foro de la Familia o HazteOir.
Finalmente, se ha referido a la tolerancia entre las distintas confesiones y ha denunciado que no se cumple el "principio de reciprocidad" ya que, según ha explicado, mientras las sociedades de mayoría católica son "tan tolerantes" con el resto de confesiones, a su juicio, los católicos no reciben el mismo respeto en países donde son minoría.
En la mesa redonda en la que ha intervenido, presidida por el senador por la Comunidad de Madrid, Luis Peral Guerra, también ha participado el catedrático de Derecho Constitucional y director del instituto CEU de Humanidades Ángel Ayala, José Peña González.
El Congreso está siendo organizado por la Asociación Católica de Propagandistas y la Fundación San Pablo CEU bajo el lema 'Libertad Religiosa y Nueva Evangelización'.